Wednesday, October 25, 2006

El olor entre las piernas, cap. 83 Las heridas del sexo

El olor entre las piernas, cap. 83 Las heridas del sexo

No quiero ser traidor de mi especie, de tantas a las que pertenezco, una en específica, pero creo que como sobreviviente de abuso sexual infantil, tengo no sólo el derecho de decir lo que voy a decir, sino que es mi deber hacerlo.

Recientemente en la isla, varias muchachitas de 10, 11 y 12 años han salido embarazadas, casi todas ellas de hermanos mayores de 14 años, o de sus padrastros, en el peor de los casos, de sus padres. Algunas madres han sido protectoras, otras no, como en el caso de Jessica Morán, madre de la menor de 10 años de Humacao, violada por su padrastro, Luis Betancourt. Esta mujer alegó que sorprendió varias veces a su compañero abusando sexualmente de su hija, pero que lo perdonó. No sé si hablo por una mayoría de víctimas de abuso sexual en el país, pero, ¿en qué mente cabe perdonar semejante atrocidad? Le he dado muchas vueltas al asunto, cuando no puedo dormir, todavía a mis 26 años de edad, recordando escenas de mi propia violación a los 6 años de edad. Creo que este asunto del perdón tiene mucho que ver, y no puede ser separado, de la bazofia cristiana que nos meten por ojo, nariz y boca, especialmente en pueblos costeros y del centro, en donde las religiones evangélicas, Testigos de Jehová, pentecostales y bautistas se han arraigado y cobrado exquisito auge durante los últimos 10 años. “El perdón es un don de Dios” predican ellos todos los días, en momentos de lucidez, cuando no están revolcándose como perros tocados por el espíritu santo (yo no sabía que el espíritu santo te toca y te obliga a tirarte al piso como si tuvieras un ataque epiléptico, eso suena más a los rituales haitianos de vudú, en donde la mambó es montada por un loa y bajo la influencia del espíritu superior puede caminar sobre brasas ardientes; yo pensaba que el espíritu santo era el epítome de la paz divina y que si te tocaba te llenaba de una paz sobrenatural, como la de los budistas, que equivocado estaba). Pero hay cosas, entiendo yo, que no se deben perdonar. Y hay actos que deben ser odiados. Y no sólo eso, yo entiendo a que en vez de enseñarle a las mentes débiles de este país a perdonarlo todo, se les debe enseñar por qué realmente uno perdona en esta vida, y qué se debe perdonar sin arriesgar la dignidad propia de ser humano, con la que uno nace y la cual se ve IRREVERSIBLEMENTE dañada por actos delictivos de esta naturaleza. Cuando una persona adulta es violada, sea hombre o mujer, se le roban elementos muy importantes: su dignidad, su seguridad de sí mism@, su paz, su estima propia… Pero en el caso de los niños y las niñas, la cosa es mucho peor. Cuando yo fui violado, recuerdo que estuve una semana que no paraba de sangrar. Ni de llorar por las noches. Ahora, imagínense a estas niñitas, que todavía probablemente hablan de la última Barbie o Bratz que querían que sus padres le compraran, cómo todo lo anterior les fue robado, MÁS la posibilidad de quedar embarazadas en un futuro cuando estén preparadas para ello (porque a tan temprana edad es posible quedar infértil de por vida), MÁS el crecimiento natural de su cuerpo (porque éste se puede interrumpir por una violación y más por un embarazo a tan temprana edad, como se ha documentado montones de veces), y a eso añádanle el hecho de que literalmente el mundo se les viene abajo, porque sobrevivir esto de parte de un familiar es como quedarte sin familia. Es para pegarse un tiro. Si yo fuera gobernador, o tan sólo legislador, o tan siquiera médico de familia, yo le aconsejaría fervientemente a estas adolescentes que se practicaran un aborto, y hasta le daría los $300.00 para que se lo practicaran.

Ahora el gobierno quiere ponerse a hacer su trabajo y legislar a favor de medidas más rigurosas en contra de los ofensores sexuales, y yo les voy a dar par de razones por las cuales estos nuevos reglamentos y protocolos no van a funcionar. Antes de comenzar con mi diatriba oficial, sería una buena idea hacer un protocolo donde se recoja dinero de distintas agencias, organizaciones y fuentes, para hacer un fondo que le pague el aborto, y las pruebas de VIH/SIDA y VDRL, y sus tratamientos, a todas las víctimas reportadas de violación. Ahora sí.

Existe en Puerto Rico un problema serio con las mujeres que teniendo hijos menores, meten al que sea a su hogar. A veces ni conocen bien a su nuevo compañero. Aquí no me quiero montar en tribuna inmediata porque respeto el derecho que tiene toda mujer, como todo ser humano, a tener sexo con el adulto consciente que le plazca. Pero mano, algunas tienen que empezar a pensar con el cerebro y no con la cabeza del clítoris, especialmente en el estado tan deprimente y decadente en que se encuentra el país en estos momentos. Uno tiene que pensar astutamente, con cantidades industriales de malicia (y que se joda, la Biblia misma advierte a los cristianos que sean “palomas con ojos de serpiente”). Uno no se puede involucrar sentimentalmente con cualquier pendejo o pendeja de la calle. No se puede confiar en nadie, y se debe siempre tener un ojo avizor en todo lo que tiene que ver con sexo. A veces estas mujeres, para citar a Mayra Montero en una de sus columnas pasadas, meten a sus casas a estos individuos que no están preparados para dar y recibir cariño de parte de un niño o una niña. Si en el país, en el macro del país, vemos a individuos de todas las edades, géneros y profesiones que no están dispuestos a dar de sí mismos, a comprometerse por una causa o por un ser humano, ¿qué podemos esperar que ocurra cuando mamá se va un momento al banco a pagar la luz, el agua y el celular, y deja a la nena o al nene con padrastro, ese individuo que no tras que no tiene conexión sanguínea alguna, tampoco tiene compromiso sentimental con los menores?

Lo otro es cómo sexualizamos a los niños desde pequeños. Los entrenamos para que sean como Daddy Yankee, que predica el sexo en sus canciones, aunque lo hace con muy buen ritmo y lírica (menos mal, porque Daddy Yankee por lo menos fue estofón cuando chiquito y terminó su cuarto año, porque antes no era tan solapada la cosa, antes nuestros padres querían que fuéramos padrotes sementales como James Dean, Marlo Brando y Al Pacino, recuerdo que mi papá me dijo que mi abuelo lo llevó a un putero en Liverpool cuando papi tenía sólo 12 años, y eso no era considerado tan siquiera perversión de menores), mientras a las niñas, ya a los 8 o 9 años (hablo con experiencia pues fui maestro un año entero de 4to, 5to y 6to grado) las visten con minifaldas, les ponen tops de manguillo, y las maquillan. ¿Acaso no estamos ya putificando a nuestros niños? Entonces somos tan insolentes y desfachatados que cuando las niñas se embarazan a los 10 años, y los nenes llegan con el culito roto y sangrando de la escuela (o de la Iglesia…), nos damos golpes de pecho y gritamos “Dios mío, ¿por qué?”. A este respecto, a lo mejor lo mejor que hice fue no decirle a mis padres nada sobre mi violación (mi papá murió y nunca se enteró, a mami se lo dije muchos años más tarde). Creo que jamás hubiera podido soportar verlos dándose golpes de pecho y gritando: “Jehová, ¿por qué permitiste esto?”.

Por último, la sexualización de los jóvenes y niños está tan arraigada, que ¿cómo les decimos que no es tan buena idea nada tener sexo a los catorce años, edad en que POR LEY ya pueden consentir tener relaciones sexuales? Y es que hasta la misma ley no está clara, porque dice que los varones y las féminas pueden consentir tener relaciones sexuales desde los 14 años, pero entonces, ¿por qué penalizar a los adultos que tienen sexo con adolescentes mayores de 14 años? ¡¿Significa esto, que la ley te dice a ti que tú puedes chichar si tienes catorce años, con gente que sea mayor de catorce años, pero menor de dieciocho?! Yo espero que no, porque entonces me da grima pensar que la ley misma lo que busca es la experimentación sexual entre jóvenes, a manera de cantacito paternalista en la muñeca, propiciando, la misma ley propiciando coño, el problema de las miles de menores embarazadas en las escuelas.

Yo entiendo que la ley tiene que atacar el asunto de cuajo, desde la raíz misma: la legislación tiene que hacer una de dos cosas: o permitirle a los adolescentes de 14 en adelante que elijan y tengan sexo con QUIEN les dé la regalada gana (tengan la edad que tengan los compañeros sexuales), o prohibirle que tengan sexo hasta que tengan 18 y tengan dos dedos de frente (y castigar a los infractores con penas de cárcel, sí Señor, por qué no, y obligar a las adolescentes, OBLIGARLAS a abortar). Porque mientras esto no se haga, los abusadores de menores campearán por su respeto. De hecho, también se debe legislar para castrar a los hombres que abusen de menores, o que violen mujeres. Sí, se les debe castrar aunque ello represente una vuelta al pasado barbárico de la humanidad (en varios estados de los Estados Unidos hay leyes que obligan a los abusadores de menores y violadores de mujeres a someterse a unas inyecciones semanales de una sustancia que les elimina el deseo sexual completamente, como parte de su “parole”; y según tengo entendido, esta es la misma sustancia que le echan a la comida de los soldados del ejército estadounidense, cosa de que no se dé lo del “don’t ask don’t tell”). También hay que legislar para obligar a los publicistas y a todas las compañías y agencias del sector público y privado del país a revisar sus anuncios y depurarlos de tanto sexo. Si nuestros niños son primero, creo que esto es necesario. Hay que dar marcha atrás en la sociedad y en la humanidad, para subsanar las heridas del sexo, que curiosamente nos han tajeado y caído encima, no por culpa del sexo mismo, sino por culpa del maldito progreso a todo galope.

El olor entre las piernas, Cap. 82 Adneritos Birds

El olor entre las piernas, Cap. 82
Adneritos Birds

En esto, como en todo, hay que reconocer las dos caras de la moneda. De no ser por Adneritos Birds, el paseo de la salida del expreso hacia Santa Isabel, frente a la gasolinera, al Oasis, y a los fast foods, en dirección hacia el Tequila’s Mexican Grill and Bar (¡que no está en Coamo, coño! ¡que es parte de Santa Isabel!), ese espacio sería uno de pura yerma del amarillo opaco de la desolación desertificada. Ese espacio, por el contrario, está lleno de color y es bastante pintoresco, al punto de que da ganas de pasar por ahí. Y es que, con sus pájaros exóticos y demás animales enjaulados, Adneritos Birds, desde hace ya casi dos años, dio comienzo a un proceso de proliferación de mercaderes-a-la-orilla-de-la-carretera, de productos y servicios tan diversos como canastas de mimbre y membrillo, puestos de batidas y frappés, guaguas de pizzas, guaguas de hot-dogs, cuchifritos portátiles, guaguas ofreciendo DISH Network, Adelphia, Liberty y Choice TV, y hasta una mueblería con visos de gran carpa de circo, vendiendo muebles a precios de rajatabla. Si bien es cierto que el paseo de la salida a Santa Isabel cogió una vida mercantil digna de la Plaza del Mercado de Río Piedras, asimismo se apropió de los vicios de esta última.

Los otros días pasaba por el paseo y fijé mi mirada en Adneritos Birds. Tres jaulas inusuales me hicieron detener mi carro, estacionarme a la orilla de la carretera e insultar al dueño, que por cierto, no paga patentes a Hacienda por ese negocio. Una jaula de 11/2’x11/2’x11/2’ (un pie= 12 pulgadas) tenía dos perritos bebé, encerrados en un espacio que se les quedaba demasiado pequeño. Asimismo tenían a 6 conejos, que aunque eran enanos, estaban sofocados en una pecera de peces veta, mucho más pequeña (de 1’x8”x8”). Pero el colmo fueron los corderos.

Yo nunca había visto corderos en Puerto Rico, y fue fuerte para mí verlos por primera vez en este país, apretujados en una jaula de red metálica que no podía contenerlos. Eran tres y no podían moverse, ni siquiera sentarse, ya que la jaula no les permitía tan siquiera ese tipo de descanso enclaustrado. De hecho, fue el atisbo a esa jaula lo que realmente me hizo detener el carro. No podía creer cómo un animal tan simbólico en un país que se jacta hasta la saciedad de ser puramente cristiano, podía ser maltratado, ultrajado y oprimido sin ningún tipo de vergüenza.

Me bajé del auto, caminé hacia el hombre, quien hablaba por el celular y se reía a carcajadas (le habrán estado haciendo cosquillas por fibra óptica o microondas de radio). Tan pronto me vio, me hizo un gesto con la mano de “lo atiendo ahora, déme un segundo”. Cuando vino hacia mí, desaté mi furia de la forma más fría posible.

-Tienes dos opciones, -le dije casi en un suspiro, en voz bien baja pero clara y fría. –O les consigues a estos animales par de jaulas más grandes, o te llamo aquí mismo a la Sociedad Protectora de Animales. Mano, ¿te gustaría que te encerraran en una jaula tan pequeña?

A todo esto, yo estaba pensando en lo único que se me ocurría: ¿Dónde está Suzette Bacó cuando uno la necesita?

El tipo me miró con cara de muy pocos amigos, y con actitud arrogante, la cual advertí inmediatamente, pues para ser honesto, la estaba esperando.

-Mano, no me hagas llamar a Hacienda también. Tú y yo sabemos que no tienes patentes. ¿Te quieres quedar sin negocio? No jodas conmigo, so cabrón.

El tipo se puso pálido. Creo que reaccionó porque pasé por el lugar varias veces luego de esa vez, y las jaulas se hicieron más grandes, y ya, aunque tiene perritos, ni vende conejos enanos, ni corderos; y los cachorros, por lo menos pueden correr dentro de la jaula de tan grandes que son ahora. Y me parece bien, porque aunque están enjaulados, el ver diferentes cachorros cada vez que paso me sugiere la idea que de los mismos no pasan demasiado tiempo en esas jaulas, ya que la gente se los lleva rápido. Sería iluso de mi parte intentar liberar a todos los animales enjaulados de este mundo, pero entiendo que lo que hice estuvo bien. Como dice mi amigo poeta Julio César Pol, “sé que la libertad no existe, pero yo defino el peso y la extensión de mis cadenas”.

Monday, October 16, 2006

El olor entre las piernas, cap. 81 Y el Dadai, que?

El olor entre las piernas, cap. 81

Y el Dadai, ¿qué…?

Recientemente se publicó una noticia sobre el arresto de los graffitteros Bik Ismo y Ske por “vandalizar” propiedad pública y privada. Le agradezco a los periódicos que pusieran la palabra “vandalizar” entre comillas. ¿Quién está más tostao? El alcalde Santini dijo, y cito “No estamos aquí para juzgar el arte. Estoy aquí para que las cosas se hagan legalmente y esto ilegal, lo pinte José Campeche, lo pinte Francisco Oller o un graffitero”.

Me avergüenza que el alcalde de mi ciudad se meta en ideológicas aguas profundas de las que obviamente no pueda salir luego. Terminó haciendo lo mismo que dijo que no haría: juzgando el arte, pues intentó dar cátedra sobre el tema, para lo cual él no tiene preparación académica, ni autodidacta alguna. Afirmó también que “el arte no admite clandestinaje, precisamente porque es tan poderoso”.

Estas palabras hay que tomarlas con pinzas. Sí, el arte es poderoso, pero debemos siempre preguntarnos por qué. El arte es poderoso porque brega con las emociones del ser humano. El arte comienza, surge de las vísceras. Luego, gracias a un proceso intelectual, se filtra en el cerebro y se le da forma, que es cuando se refina su belleza. Es entonces cuando se le llama arte. Eso es todo. En cuanto a clandestino o no, el arte puede serlo o no serlo, para ser arte, estos adjetivos realmente son irrelevantes. Y reincido en expresar que un alcalde mediocre, politiquero y que no hizo más que ganar las elecciones y se subió el sueldo, un individuo de apellido mafioso no tiene las herramientas necesarias para determinar qué es arte y qué no es, qué arte es apropiado para ciertas áreas, ni siquiera para determinar qué arte es clandestino o no.

La dueña de la galería Petrus en Miramar, Sylvia Villafañe debió haberse quedado callada, si sus intereses realmente son en virtud del arte. La mujer dijo y vuelvo a citar “El arte es algo que tiene estructura, expresión y quiere comunicar, y cuando es clandestino es que no quiere entrar a una estructura… No es lo mismo arte que vandalismo”. No me importa para nada si esta mujer representa al pedante de Antonio Martorell, ni si representa al magnífico ser humano de Víctor Hernández Cruz. Para entender el arte, y sobre todo, las nuevas expresiones post-vanguardias, hay que dejar a un lado los manierismos elitistas de los galeristas. Asimismo, hay que ser, hasta cierto punto, un artista también. Esta cuestión de estructura… ¿a qué se refiere? El artículo en el periódico Primera Hora lo deja ahí. Pero yo no pienso dejarlo ahí.

La estructura en una pieza de arte, así como en una serie, y más allá aún, en una exposición, se refiere al registro determinado que se da como resultado de la combinación entre vocabulario técnico y temático. Eso es estructura simple y sencillamente. Los graffitteros entienden esto, y muchos, autodidácticamente, ojo Sr. Santini, han aprendido a incorporar esta regla en sus creaciones. Que conste, que Bik Ismo y Ske, son artistas ya consagrados en la isla, y ambos estudiaron en instituciones académicas. Esta regla se la saben de memoria. Entonces, un graffiti como el de la pared de la discoteca El Teatro, o como los que se encuentran en cada esquina de la UPR de Río Piedras, ¿no comunican nada? Hombre, claro que sí, lo que pasa es que no comunican lo que queremos que nos comuniquen. Por eso es que es clandestino, porque dicen lo que no queremos escuchar y como no lo queremos escuchar, nosotros mismos, los artísticamente sordos, los clandestinamos. Una vez escuché al Prof. Michael Sharp, un tierno abuelito inglés que me daba la clase de Literatura Inglesa desde el Romanticismo hasta las vanguardias, decir que “true poetry always says something you don’t want to hear”. Las rosas son rojas, los zapatitos me aprietan, las medias me dan calor, eso ya no es poesía, tanto como las viejas y antiguas formas del arte plástico, ya no lo son ahora. Asimismo, la gente no escribe en nuestros días por las mimas razones que se escribía hace medio siglo atrás, tanto como nuestros artistas contemporáneos no hacen arte por las mismas razones y necesidades, que digamos, durante los 1800’s. El arte se mueve y la gente también, pero la relación entre arte y gente sigue siendo la misma. Esta mujer dio a entender que cuando el arte es clandestino no tiene estructura, porque no quiere entrar en estructura alguna, y a mí estas palabras me dan grima y me suenan a nouvelle bourgeoisie. Todo lo que hay en galerías es arte, lo demás es vandalismo. Ya ven por dónde va la cosa.

No se equivoquen, hay más detrás de todo esto. Hay toda una campaña de estigmatización e ilegalización de todo lo que el gobierno cree que no es normativo. El arte en galerías es normativo. La lotería tradicional es normativa. Pagar las contribuciones y los taxes es normativo, no importan cuánto nos asfixien. Los negocios de drogas y armas son ilegales, pero más que nada, porque no rinden planillas. Los demás argumentos, especialmente los religiosos, son pura mierda e hipocresía. Los graffiti son ilegales porque supuestamente ensucian la ciudad. Pero hay ahí otra hipocresía más. ¿Quiénes ensucian más, los graffitteros o los políticos con su sucia propaganda pegada por doquier en año de elecciones? En ocho meses, los políticos y politiqueros ensucian mucho más que todos los graffitteros de Puerto Rico (cuya suma no asciende a más de cincuenta y cinco) en plena actividad durante un año. Esto también es parte de una campaña masiva que viene de Estados Unidos, en donde se le dicta a la gente qué es lo que pueden ver y leer. ¿Sabían que en estados como Wisconsin y Texas, hay restricciones sobre la pornografía (no pornografía infantil, sino pornografía regular, común y corriente), donde ni siquiera adultos pueden verla o comprarla? Entiendo lo de los menores, siempre lo he entendido. Yo esperé hasta cumplir los dieciocho años para ver mi primera porno, aunque comencé a tener sexo a los 14 años de edad sin detenerme desde entonces. Pero no entiendo cómo se les puede prohibir a adultos que vean o lean lo que les venga en gana. Asimismo, no entiendo el afán de esta señora de catalogar unos estilos como arte y dejar otros en la sombra del vandalismo clandestino. O mejor dicho, la entiendo mucho más de lo que creía o quería entenderla. La Sra. Villafañe estableció que Santini “siempre ha cooperado para mantener el área de su galería limpia y le ha auspiciado actividades de artistas”. Así que tenemos, dos artistas arrestados que ya tienen reconocimiento internacional como artistas, un alcalde mafioso, corrupto y artísticamente analfabeta, y una galerista prostituta que vende sus encantos y su apoyo al mejor postor.

Y yo sigo preguntándome, ¿y el Dadai qué? El Dadai se creó como una respuesta caótica a la estructura rígida del arte que llevaba más de cinco siglos imperando. Que de repente un objeto encontrado (readymade) como un inodoro pudiera ser arte, se lo debemos al Dadai, como le debemos su sabor tal vez no clandestino, pero sí decididamente irreverente. Además, entiendo que Basquiat y Haring deben estar no revolcándose en sus tumbas, pero riéndose de estos cabrones que se creen que porque han ido a un museo una o dos veces en sus vidas, ya pueden dar una cátedra del arte, una manifestación del espíritu humano que lleva milenios gestándose.

Yo apoyo a Bik Ismo y a Ske. Me molestan los graffitteros que hacen graffiti por hacerlo, tanto como me molestan los artistas que hacen arte por hacerlo como Martorell, los cantantes que cantan por cantar como Luis Fonsi (y por ello, cantan la misma mierda over and over, escuchas una canción suya y ya las has escuchado todas), los escritores como Coehlo , que escriben por el mero hecho de escribir; y hasta la misma gente que habla por simple y sencillamente hablar. Si hay algo en que la Sra. Villafañe tiene razón es en que el arte debe tener estructura, lo que no significa que el graffiti como género (porque ya no sólo es un medio sino un género en sí mismo) no la tenga. He visto esculturas de arte público que me chocan por la poca o ninguna estructura que tienen. Asimismo, he visto obras arquitectónicas que pudieron ser geniales, y que se caen porque no tienen estructura, porque en el caso de la arquitectura, el espacio en torno al cual se construye el edificio es parte de su estructura, y todos sabemos que en Puerto Rico no existe tal cosa como planificación urbana (¿con qué se come eso?). Pero yo apoyo a Bik Ismo y a Ske, como mismo apoyo a Mero y a su hermano Sir Exor, de la misma forma que apoyo a Remix y a todos los graffitteros que conozco de la IUPI y de la Escuela de Artes Plásticas, porque nos enseñaron lo mismo en ambas instituciones: estructura.

Por último, lo que propone el alcalde me parece un insulto a los graffitteros, que entiendo que deberían considerar organizarse, y por qué no, sindicalizarse. El jefe de seguridad del alcalde mafioso, un tal Mercado, dijo que se “inició conversaciones con la Escuela de Artes Plásticas para proveerles lugares a los artistas para que dibujen, pero sin usar aerosol. El concepto es que los artistas se roten y cada obra esté expuesta por un máximo de 60 días”. Migajas. Sobras. Es un insulto. Es querer tratar a artistas con un nombre hecho, como niñitos que aprenden los nombres de los colores usando fingerpaint en kindergarten. Sería como decirle a Martorell que ni le ocurra volver a mostrar su culo lleno de estrellas y celulitis en el MAPR, que la próxima vez se consiga dos sombreros, uno para delante y el otro para tapar su trasero, que no nos interesa verlo desnudo. El gobierno no puede determinar lo que es arte. Hay un peligro muy oneroso en ello. Se me ocurren Hitler y Stalin.

Y para callarle la boca al alcalde bolitero, yo no creo que si Campeche y Oller estuvieran vivos y pintando en las paredes, él se atrevería a arrestarlos. Y es que ellos dos dejaron una vena de arte en este país, una herencia que esta jodia isla politiquera y fundamentalista no se merece. Dice el pichón de alcalde, que todo esto es parte de un plan agresivo de limpieza y de creación de jardines que enverdezcan la ciudad. Me alegro que por fin se ponga a hacer algo, a ver si los árboles tapan los carteles politiqueros y la basura de esta ciudad. Marcell Duchamp se lo agradecería.

Friday, October 06, 2006

El Olor entre las piernas, cap. 80 La molestia literaria

El olor entre las piernas, cap. 80 La molestia literaria

Esta columna va dedicada a los ganadores de ambos certámenes de El Nuevo Día: Karen Méndez Sevilla, amiga del alma, Luis Othoniel Rosa, a quien estimo muchísimo desde el Taller de Mayra y "Cuentos de Oficio", y a mi querida amiga Jocelyn Pimentel. Si alguien tenía que ganar ambos certámenes, eran ellos tres. Mis más cándidas felicitaciones.

Pero tengo una molestia encima. Tiene que ver con el certamen de poesía. Y me encantaría que Carmen Dolores Hernández leyera esto. Entiendo que en este certamen comenzaron el camino de la redención, luego de declarar ganadores a Javier Ávila (dos veces, la segunda vez se justifica mucho mejor que la primera) y a Juan Carlos Rodríguez. Entiendo que la propuesta de Jocelyn Pimentel no solamente es fresca y original, pero en ella permea también una dulzura que entiendo se debe reconocer. Después de todo, la poesía, y el arte en general, sólo tienen que lograr la belleza, sin importar si tal es una belleza oscura, torturada, o por el contrario, inocente y dulce. Me gusta que por fin esta vertiente se esté reconociendo como poesía propiamente.

Sin embargo, mi queja tiene que ver precisamente con los pasados certámenes y cómo todavía en este certamen no se ve un cambio real en las opciones ganadoras. Case in point, y sin titubeos de falsa modestia, mi poemario "Sistema de Nomenclatura Binomial". Quiero que esto quede sobre la mesa, bien claro, no me molesta perder ante tan buena poeta como Jocelyn, no porque sea mi amiga, sino porque tengo el placer de decir que le he seguido la trayectoria a través de su blog "Comentario" y he visto su evolución, además de haber sido también partícipe de su proceso creativo. Pero me molesta no haber recibido la mención honorífica que tanto deseaba.

Me explico. Yo sabía ya de plano que mi poemario no ganaría, por concepto de publicabilidad, y para ello, proveeré un nuevo blog, para que sean ustedes los lectores, jueces de lo que digo. Sin embargo, tenía la certeza de que me llevaría una mención honorífica que simplemente reconociera una labor bien hecha. Porque mi poemario, modestia aparte, es una propuesta muy nueva y muy original, que apostaría a que a nadie se le ha ocurrido como idea-primer-motor para un libro. En él, no sólo jugué con el significada y origen de las palabras, mas el poemario mismo es una vuelta a la mirada naturalista de los "descubridores/colonizadores/expansionistas" de América. El poemario es el resultado de una mezcla entre el afán naturalista de clasificar las cosas (en este caso, la poesía misma) para conservar un récord de la existencia de las mismas, con un gran sentimiento de eliminación del "YO" para ensalzar el "NOSOTROS", algo muy zen y muy budista. Y hasta queer.

No hablo más. juzguen ustedes mismos. http://sistemabinomial.blogspot.com

Felices lecturas!

Friday, September 15, 2006

El olor entre las piernas, cap. 79 Esto tambien es una verdad oculta

El olor entre las piernas
Cap. 79
Esta también es un a verdad oculta

No sé hasta qué punto es ridículo, y hasta cuál es genial, pero desde hace un tiempo vengo ponderando el significado oculto de los anuncios de publicidad. Con todo el revuelo del concurso de Miss Universe, yo espero que las niñas de este país se den cuenta de que hay mucho más que ser “bella” (a fuerza de tres o cuatro capas de bondo, y múltiples cirugías que depredan el aspecto NATURAL de la belleza, siendo éste la versatilidad y variedad de la misma) para una mujer. Siempre he querido decir esto en voz alta, tal vez hasta gritarlo: ¡LAS MISSES NO COMPONEN UN CARAJO EN EL MUNDO, NO SIRVEN PARA NADA, NI SIQUIERA SON EMBAJADORAS DE NADA, PORQUE NO REPRESENTAN NADA! Gracias. Good night and good luck!

Adonde me dirijo es a esa sarda de publicidad en torno a el lugar de nacimiento de Zuleyka y su verdadero pueblo (el que la vio crecer y criarse). Todo esto me parece genuinamente ridículo y una pérdida de las aproximadamente 37 páginas de periódicos que se le han dedicado a la “beldad” (¿veldá que sí?) desde que ganó el concurso, lo cual deja decir mucho de los intereses particulares y culturales de esta ínsula tan extraña (AHORA comienzo a entender por qué José Ortega dijo lo que dijo, y cuánta razón tiene…). Pero todo esto requiere un análisis más serio y con mucho más rigor, lo que me lleva a entender que en Puerto Rico ser una Miss Universe es un fin para el cual todo lo demás es un medio, como ser parte del circo de los legisladores y el Senado, que rápido se prestaron a hacerle un homenaje, como los que siempre hacen derrochando sabrá el Diablo cuánto vino Tavel Rosé (el vino de Paco Villón de esta semana, y que podría ser, de no ser por su rara presencia en Puerto Rico, “the Coca-Cola of bottled wines”), cuánta carne Angus (García Padilla… ¿estabas por allí?) y cuántos piscolabis hechos de quesos Camembert, malgastando los chavitos del pueblo. Porque le hacen homenajes a cualquier pendej@ que sale en la prensa, logrando alguna meta mediocre, que nadie sabe cómo realmente afecta a Puerto Rico positivamente, pero que todos honran como algo bueno y digno. Todos menos yo y l@s que son como yo, que piensan que las misses no tocan pito ni flauta en Puerto Rico, ni en ningún otro país. No componen nada, no aportan nada con sus visitas, y cuando la marea vuelve a bajar, y los vientos se disipan, al final todo queda igual, como si no hubiera pasado nada, como es la realidad. Entonces, este análisis me lleva a más confusión, porque no sé en que piensan las mujeres de este país, ni las profesionales, ni las amas de casa (que también son profesionales, porque eso es una realidad), ni las que viven de la tarjeta de la familia. No sé en qué puñeta piensan.

Ayer en la tarde, frente a mi casa en Coamo, una pareja de adolescentes sostenía una discusión acalorada.

-¡Yo ya no quiero estar más contigo! – le decía la joven adolescente, quien portaba un jumper de tela escolar de cuadritos, lo que me indicó que pertenece a la superior vocacional que hay detrás de mi casa, y quien, para sorpresa y júbilo míos, no daba ningún indicio de estar embarazada.
-Chica, no te vayas. Dame un break, -le decía el alacra, montado en una bicicleta, con los pantalones mucho más abajo del culo, enseñando los boxers y un poco la raja de su culo, con un tank top blanco y un pañuelo enrollado en la frente.
-¡Vete con Isabel! Por mí, ella se puede quedar contigo. Y te puedes largar con ella. Yo no soy pendeja.

Esas palabras de la niña me obligaron a asomarme por la ventana y dedicarle un buen momento de observación. Su rostro parecía iluminado por la luz del sol del recientemente pasado mediodía, y es que cuando la gente toma buenas e inteligentes decisiones, la luz del día, o cualquier luz que esté presente en el momento, los ilumina como un juego óptico del destino.

-Mira, llama a este número. Te van a decir que yo no estuve con ella ayer.
-¿Y quién va a contestar, uno de tus amigos? Yo no te creo. Mira, en verdad, quédate con ella. Yo no soy pendeja, te lo digo.
-Ven acá, chica. No seas así.
-El que quiere anda, -le dijo ella, ya alejándose tanto de él que perdí contacto visual con ella, aunque se escuchaba su voz. -¿Ves como te quedas ahí como un pendejo? ¿Por qué no vienes adonde mí? ¿Ves lo que te digo? ¿Qué me estabas mintiendo, so embustero? Si en verdad no saliste con ella, ¿por qué no te atreves írteme detrás?

Y se alejó y lo dejó allí, con su cara de pendejo anonadado, sus pantalones caídos y sus boxers de cuadritos, como la tela del uniforme de ella. Me pareció una escena muy bien lograda de una telenovela, aunque ni mexicana ni venezolana. Fue natural. Pero luego, me pareció aún más genial mientras le decía un ¡BRAVO, BIEN POR TI! a la adolescente no embarazada. “Empiezas por ahí, y terminaras siendo la primera mujer en formar una colonia terrestre en la luna, o descubrirás la cura para el SIDA, o encontrarás la forma de hallar la paz política y civil del mundo, ¡porque vas a llegar lejos!”. No pude evitar pensar eso, y me entristeció, porque a veces espero demasiado de las mujeres. Me olvido de muchas optan inteligentemente por ser madres, cosa que yo no entiendo, a lo mejor porque hace mucho que le metí un buen batazo a mi reloj biológico. Me olvido de que muchas tienen la ilusión de casarse y formar una familia. Y me olvido de que, por ridículo y far-fetched que parezca, muchas mujeres, todavía a estas alturas del siglo XXI, van a la universidad a buscar novio y embarazarse. A veces me molesto con este tipo de mujeres, tal vez porque me niego a olvidar que hubo un movimiento feminista que planteó la posibilidad de una igualdad que no existe. Tal vez porque me niego a olvidar que durante dicho movimiento muchas mujeres fueron escupidas, encarceladas y violadas por creer en algo digno de creer. Tal vez porque mi madre no tuvo las oportunidades que tuvieron muchas de estas mujeres y que tiraron por la borda. Tal vez porque mis dos hermanas sí las tuvieron y las desperdiciaron como les vino en gana, frustrando así los esfuerzos de mi madre. Tal vez porque no tengo héroes, sino heroínas, como mis amigas Mónica, que una de las mujeres más inteligentes que jamás he conocido (que no sé como coños logra balancear sus labores científicas de física, astronomía y astrofísica, con su pasión por la narrativa y la poesía); Rosalina, que es una excelente narradora y poeta, y quien tiene la ominosa habilidad de comprender el mundo medieval como jamás he visto a nadie entenderlo; mis dos primeras mentoras en la creación literaria, las profesoras Helena Méndez (narradora de puta madre, excelentísima editora y profesora de yoga) y Loretta Collins (una poeta genial proveniente de California y con actitud y perseverancia de California), y todas aquellas mujeres que me han moldeado, como más recientemente, mi supervisora en traducción, Marielba Cancel, dueña del blog La Caribeña, de quien no me canso de aprender formas nuevas de reinventar un mismo chiste y escribirlo. Sí, espero mucho de las mujeres, tal vez porque siempre he pensado que se desde el principio de la humanidad, se han llevado la peor parte en todo, y porque ya me apesta que sea así. No quiero que sea así. Y por eso también escribo contra la publicidad de este país que odio y amo tanto, porque se presta para la venta de un sueño erróneo, porque SI, NO TENGO MIEDO A DECIRLO Y PAGAR LAS CONSECUENCIAS: SOÑAR CON CONVERTIRSE EN MISS UNIVERSE ES UNA FALTA DE RESPETO A UNA MISMA COMO MUJER, Y A AQUELLAS QUE VINIERON ANTES DE UNO, QUE LUCHARON POR UNA IGUALDAD QUE NO SEDIO NUNCA.

Y ahora, adonde iba desde el principio: desde hace dos semanas han pasado unos anuncios en los periódicos, aparentemente anunciando una nueva telenovela o unitario que se llamará La verdad oculta. Entonces ponen algo como esto:
Ella _ _ _ _ _ _ _ _ _ un túnel entre esta _ _ _ _ y la _ _ _ _ _ _ _.
¨ > < + ø¡ ¿ ♥ ¡ . ~ ♥ : . ( ¡ > ♥ ! .

Sucede que toda esta verborrea lo que quiere decir es: “Ella construirá un túnel entre esta vida y la próxima”, pero lo que realmente pretende decir, con la foto de una mujer madura muy sonriente, es: “Ella es pobre, se enamorará de Osvaldo Ríos, que caerá desde el cielo en paracaídas para salvarla de la villana, que también quiero hacerse rica a cuestas de Osvaldo Ríos, quien gusta de montar a caballo, sin que se sepa su pasado oscuro de marido maltratante…”, y por ahí sigue la retahíla de tramas cursis y gratuitas que tanto divierten a la gente sin criterio de este país. Pero con corazoncitos, signos de exclamación y otros símbolos, hasta este escritor se detiene un momento para buscar en la clave qué quiere decir el anuncio.

Por último, me gustaría añadir un comentario final sobre Zuleyka. El peligro de la reinvención está en lo representativo. El peligro viene cuando otros/otras nos reinventan a nosotros, cuando ese proceso debe ser personal. La representación de la mujer puertorriqueña, culona, tetona, caderúa, con pelo rizo y bella, en una niña que con toda probabilidad es anoréxica o bulímica, o peor, ambas, y cuyo cuerpo puede fácilmente ser levantado por la primera ventisca de un sistema atmosférico desorganizado tipo I, me parece errónea. Zuleyka no representa la belleza de este país, así como las muchas que han intentado ganar el concurso o lo han ganado antes que ella. No representan a las mujeres de mi país, que comen grasa y carbohidratos con cojones porque es parte de lo que somos, de nuestra herencia. Nuestros genes se han adaptado para aguantar y adaptar la ingesta de arroz, habichuelas y rajas de aguacate diarias. Y esa niña-fideo no nos representa, ni a nuestras mujeres, ni al pueblo en sí. Y estoy harto de la gente que le da a este trapo de concurso más importancia de la que se merece. Es la misma gente idiotizada que no tiene sueños reales y válidos. Que nadie me dice que aspirar a reina de belleza es un sueño válido porque no lo es. No es válido imponer una figura surrealmente flaca a un pueblo de mujeres, que tras sufrir la baja autoestima general de 5 siglos de colonización, también tienen que lidiar con el estereotipo americano impuesto. No es justo que nos hagamos estos a nosotros y nosotras mismas. Alguien tiene que parar esto.

El olor entre las piernas, cap. 78 Florencio

El olor entre las piernas
cap. 78
Florencio

Desde que tengo uso de razón, he detestado la oferta televisiva puertorriqueña. Esto aduce a múltiples razones, entre ellas, la no-conciencia de nuestra condición de colonizados, las malas copias de programas americanos que tienen nicho en Estados Unidos pero no aquí, lo que me lleva a la falta de originalidad en la oferta, lo repetitivo (¿cuántos años estuvo El Show de las 12 al aire, siempre con el mismo intro?), y lo crasa y descaradamente vulgar del resto de la programación, y los talk-shows, que ya no son como los de Cristina antes, sino pura gritería y puñetazo limpio por el deporte del rating.

En cuanto a esto último, case in point, los programas de Raymond Arrieta y El Gángster. “No te duermas” es un programa estúpido. Es la exaltación de la sexualidad sin la sexualidad. Chicas en bikini, exceso de doble sentido tendiente al sexo, más chicas en bikini, más drama barato diario de celebridades contra celebridades, mucho bochinche, y más chicas en bikini o gistro. No tengo nada en contra de las mujeres. Para nada. Pero aún siendo gay, no me satisface el programa los miércoles. Si quieren realmente pasar un programa que sea sobre sexo, de sexo, y para el sexo, ¿por qué no simplemente pasar pornografía a esa hora? Pero ese coqueteo con lo sexual, pero a paños tibios, es puro cocktease. Es mediocre, ridículo, y una de las razones por las cuales critico fervientemente la televisión de mi país.

Otra cosa son los programas que resultan copias malísimas de programas americanos. Hace falta sólo ponerse a ver “Zúmbate”, el desaparecido “Mira que te veo”, y otros. Son copia fidedigna, o facsímiles razonables de America’s funniest videos, y otros sitcoms.

Los talk-shows dejan mucho que desear. Laura se puso el disfraz de vigilante y vengadora de los desafortunados, y se olvidó de que ella misma no escapa del escrutinio público y los otros vigilantes y vengadores. Entonces está la pendeja de Marta Susana. Estoy harto de ver cómo la bruja se atreve a decirle a los panelistas cómo deben vivir su vida. También había hasta un padre católico que tenía un talk-show (que daba pena ver, porque entonces el show se convertía en jirimiqueos y mucho lloriqueo). Todos estos cabrones comenzaron sus carreras imitando a Oprah (de quien se olvidar de emular lo mejor, como por ejemplo, el book review semanal, y el hecho de que Oprah no permite que sus panelistas se pasen de la raya) y a Jerry Springer (que dejaba que la gente se diera puños y bofetadas por ratings). Un buen proyecto de ley internacional sería regular estos talk-shows, ponerles unos límites, y enjuiciar a los presentadores cuando se den situaciones en donde una madre le pega a su hija adolescente embarazada en plena audiencia.

Aquí no hay originalidad. No entiendo cómo un pueblo tan fanático de Star Wars y cada película de fantasía, misterio y ciencia ficción que llega a la isla, no se ha inventado programas de esa temática. Que nadie me diga que no hay budget. Esa es la peor excusa que se pueden inventar. Por ejemplo, aquí sería genial hacer una serie como las de “Law & Order” y “CSI”. ¡Hasta le sacaríamos partido a la extensa criminalidad que reina en el país! ¡Nos serviría de material para escribir! Y si nos dejáramos de tapujos sexuales, podríamos hacer una serie como la de “Big Brother”, específicamente, como la del season de Brasil, de la cual, uno de los protagonistas era un muchacho exhibicionista que gustaba de andar desnudo por toda la casa mostrando su gigantesca pieza. ¡Podríamos hasta hacer una especia de “Survivor” en Mona, Monito y Desecheo! ¿Qué nos pasa Puerto Rico? Que somos un reguerote de copiones, pero no copiamos lo que tenemos que copiar, sino lo más fácil de copiar, que es siempre lo peor de las demás culturas que no rodean. Para eso solamente es que miramos fuera del país.

Entonces, ¿por qué apoyar la televisión del patio? Me han dicho que soy un vendido, porque veo TV satélite y no apoyo el talento local. Pero, ¿qué talento tiene realmente gente como Antonio Sánchez “El Gangster” y Raymond Arrieta? Y sobretodo, ¿por qué nos rebajamos tanto y les lamemos el culo al llamarlos artistas? Estos individuos, como la mayoría de los “artistas” de la TV boricua no tienen talento alguno, salvo para el chiste fácil, que siempre termina siendo de doble sentido sexual (y aclaremos que el arte no debe nunca ser de DOBLE sentido, pues sería bidimensional, sino de TRIPLE, CUADRUPLE y de MULTIPLES sentidos, pues el arte verdadero es polisémico). Yo me enorgullezco de gritarlo a viva voz: ¡YO NO ESTOY OBLIGADO A APOYAR EL “TALENTO” DE MI PAIS, SI NO SE MERECE APOYO ALGUNO! No hay quien me obligue a hacerlo.

Esta mañana leí una columna de VOCES de El Nuevo Día, de Cecilia la Luz, hablando del personaje Florencio Melon Pujals, creado por Raymond Arrieta. Tengo unas observaciones que hacer del mismo:

1. Este tipo de comediantes ridiculiza a mucha más gente que una minoría sexual.
2. La supuesta pérdida de audiencia no creo que se deba a un despertar de la conciencia puertorriqueña, la cual sigo pensando que está dormida. Me parece que lo que planteó la ilustre es una utopía.
3. El comediante no se retiró por presión ejercida por las campañas de la Organización Unidos por la Igualdad. Pensar que esto es así, sería otra utopía más, y muy poco sabio en medio de una guerra tan obvia entre los hetero que siguen haciéndonos la vida imposible, y los homo que queremos cambio a todo cojón.
4. Si bien es cierto que la televisión americana ofrece más variedad y alternativas, también es cierto que esto hay que cogerlo con pinzas. Por ejemplo, no veo en qué pueden ser edificantes la mayoría de la producción programática de MTV, MTV2 y VH1, salvo los vídeos musicales, que son una forma de arte en sí misma, y los programas que ofrecen sobre historia de la música (específicamente en VH1). En esto tengo que incluir un programa que me pareció bastante chévere de MTV, pero que lo veo razón de ser en ese canal, porque su contenido no tiene nada que ver con música, pues fue un reality show de artes marciales llamado Final Fu. Esto me lleva a “Will and Grace”. Este programa no es exitoso por lo exitoso de las vidas de los personajes. Eso sería una falacia y bedtime story. El programa es exitoso porque tiene algo que en la lengua de mi padre se llama “wits”. El diccionario de mi laptop lo define de la siguiente manera: “mental sharpness and inventiveness; keen intelligence; a natural aptitude for using words and ideas in a quick and inventive way to create humor”. El problema del “wit” es que para lograrlo, hay que tener un gran conocimiento de las dos lenguas maternas: la puramente académica y la de la calle, de las cuales sólo conocen la última estos animadores y “artistas” mediocres de la TV boricua. “Will and Grace” utiliza un tipo de comedia que obliga a pensar, que es el tipo de comedia que se puede ver una y otra vez, y todavía provoca risa, que es a lo que todo comediante y productor de comedia debe aspirar. No me imagino a La Comay teniendo “wits”, ni a Laura Hernández, aunque a lo major drogada sí, ni a Maripily. Bueno, de esta última me ha dado con pensar que se hace la bruta porque tiene más “wits” que el país entero. Lo otro que hace a “Will and Grace” tan exitoso, es la habilidad que tienen los personajes de burlarse de sí mismos. Para comenzar SON personajes en todo el sentido de la palabra, en cuanto a que, son multidimensionales, tienen carne, son reales. Yo no me puedo imaginar a Florencio Melon Pujals teniendo algo así como una rutina diaria. No me lo imagino cepillándose los dientes, ni planchando ropa para trabajar, ni amando a otra persona. Es un personaje que ni siquiera alcanza a ser silueta, en oposición a Will, Grace, Jack y Karen, cuya multidimensionalidad hace posible que puedan burlarse de sí mismos una y otra y otra vez, por más de cuatro seasons. En cuanto a la auto-burla, que provoca la auto-reflexión, y por ende, la auto-evaluación, que es parte de un proceso natural de sanación, sólo funciona sin ofender cuando es auto-. Por eso, la comedia juega con filo tan fino de la navaja, entre lo cómico y lo inhumanamente maltratante. No es lo mismo que otro te ridiculice a que te ridiculices a ti mismo, lo que me lleva a dejar algo sobre la mesa: lo más que siempre me ha molestado de personajes como Florencio, la Localizada y otros, es que se trata de la visión maleducada, o simplemente, no educada que un imbécil heterosexual tiene sobre nosotros. Estos personajes ni siquiera nos representan, porque, pónganse a pensar, si es verdad que la mayoría de los homosexuales están todavía en el clóset, significa que la mayoría de los homosexuales son puros machos a lo macho heterosexual, con todo lo bueno y lo malo que esto conlleva.
5. En Puerto Rico, la agresión televisiva hacia los homosexuales (y en esto las lesbianas tienen una ventaja, pues son rarísimos, casi inexistentes, los personajes ridiculizando a las buchas truckeras en la TV del patio), va mucho, mucho más allá de la inseguridad de la masculinidad. Y en esto, como ya verán, tenemos culpa todos, tanto hombres como mujeres. Y es que en esto se ve reflejado el odio hacia la mujer. Me explico. Yo siento una intensa furia cada vez que un pana mío gay me dice “nena”, “loca” o “pata”. No sé, pero nunca pude superarlo. Debe ser debido a la carga semántica tan fuerte que esas palabras tienen cuando van dirigidas hacia un hombre, sea de la orientación sexual que sea. Y es que, tenemos la visión de que el hombre no debe ser afeminado, ni debe tener en un demeanor nada que ver con lo femenino, porque lo femenino es débil. Lo cual nos lleva al mito de Adán y Eva, y la culpa, como siempre, terminarán teniéndola los machos que escribieron la Biblia y dieron origen a la mayor plaga que la humanidad ha visto jamás, que no es el SIDA, sino el cristianismo. Lo femenino es débil. Los nenes no lloran, las nenas sí. Los nenes se dedican a los carros y a tareas fuertes. Las nenas para la casa. Otra cosa, mucho más fuerte: las mujeres están hechas para ser folladas, para “coger bicho por la crica”, los hombres para “dar bicho por la crica”. Y el problema entre los homosexuales, la incomodidad que viene con esas palabras, es que nosotros no tenemos opción en cuanto al sexo: o somos tops (damos por el culo), o somos bottoms (cogemos por el culo). Harto estoy yo de declararme versátil (hago de las dos cosas, 50%/50%), sólo para que venga un amigo gay no-iluminado y me diga que si soy versátil es lo mismo que ser bottom. ¡Hasta nosotros mismos apuñalamos la mujer! ¡Somos todos una sarda de misóginos! Y me incluyo, porque si no fuera misógino, no me sentiría incómodo cuando me dicen “loca”, “nena”, o “pata”. No me sentiría incómodo con Florencio Melon Pujals. Por eso, siempre le he aconsejado y requete-aconsejado a mis amigas y a todas las mujeres a las que pueda aconsejar, que vayan a Condom World, se compren el dildo más grande que vean, y se lo empujen a sus maridos y novios por el culo, para que aprendan a sentir como ellas y se sensibilicen. Es lo mejor que hay para humillar a un hombre heterosexual y lograr que se le bajen los humos. Que los amarren de la cama boca-abajo, y cuando él se crea que le van a dar la mamada de su vida, que le alcen las piernas y le metan el puño con manteca Cerdito, para que entiendan que de una mujer salieron, y que por una mujer tienen vida, y que tienen madres, hermanas, esposas e hijas, y que la mujer se merece el mismo respeto, la misma posición, y las mismas oportunidades que nosotros, y que NO ESTA EN NOSOTROS otorgárselas, porque no se trata de hacerles un favor, ni re reconocerles una condición. Se trata de humillarnos nosotros mismos y entender ellas también tienen sangre en las venas, y sufren como nosotros, pero que, a diferencia de nosotros y por culpa de nosotros, se han llevado la peor parte en todo durante los 14,000 y pico de años de historia de la humanidad.

Me alegro de que Raymond se haya retirado, aunque sólo sea por unos meses. Es bueno eso de reinventarse. Es saludable. Pero reconozco que creerme que este ha sido el fin de Florencio sería un error. Lo único bueno que tengo para defenderme de sus ataques y los de todos los demás comediantes del país, es apagar la TV o cambiar de canal.

Monday, June 19, 2006

El olor entre las piernas, cap. 77 La incomodidad: Pinky o las aberraciones sexuales del vecino del frente

El olor entre las piernas, cap. 77
La incomodidad: Pinky o las aberraciones sexuales del vecino del frente

Sucede que ya no puedo darme el paseo de rigor semanal por Plaza las Américas, porque ya no vivo en San Juan. He decidido cerrar la parte dos de este libro, sin saber si habrá una parte tres, con este escrito. Una semana antes de mudarme fui a Plaza, a pagar mi celular. Me estuvo curioso este gordito vestido extremadamente caco, que tenía un CD player, y le estaba cantando una cancion a la muchacha de la carreta frente a Suncom y a la tienda de Agatha Ruiz de la Prada. "Pinky", como lo he apodado, uno, porque no sé cómo se llama, y dos, porque tenía una bata, perdón, una camisa rosada; le rapeaba a la muchacha, sin dejarla trabajar. La pobre tenía la piel del color de una hormiga brava, y hablaba por teléfono sin parar, o por lo menos, pretendía hacerlo muy bien, creo que tratando de ignorar a Pinky, pero no lo lograba. Cuando no pudo más, la chica llamó a Seguridad, y vinieron dos rangers a sacar al tipo de allí.

-¡No lo saquen! -gritó una señora mayor, a quien probablemente le pareció nice y una vuelta al romanticismo del ayer la escenita del tipo.

Yo confieso una reverenda incomodidad cada vez que veo a Pinky en mi camino. Luego de eso, lo vi frente al MacDonald's del primer piso. Le rapeaba a las dos muchachas de America OnLine, mientras el muchacho de America Online se reía sin parar. El tipo era blanco, bien alto, como de 6'3", bastante rubión, un rubio casero, como le digo yo a los que son rubios de verdad, pero del patio, con el pelo en un falso mohawk, que le quedaba cabrón. Y yo me preguntaba si el chamaco se reía porque le parecía romántica la escenita de Pinky, o porque a lo mejor quería que Pinky le rapeara a él. Una muchacha gótica entró al MacDonald's agarrada de mano de su novio, tamién gótico.

-Vaya mami, me visto de rockero pa que me hagas caso. Y a tu novio que diga algo, que le rompo la cara.

Ahí decidí que basta de pocaverguenzas, una cosa es el tripeo, otra la falta de respeto. Mi incomodidad ante este ser repulsivo, caló profundo, cuando reflexioné y me di cuenta de que el individuo en cuestión es un reflejo de los nuevos valores que se enseñan en la radio mentecata de este país, entiéndase en la MEGA, SALSOUL y otras emisoras que gente débil de mente y sin capacidad de juicio propio no debería escuchar, por el bien de este país, y programas de TV que son incontables, que hacen que diga con orgullo !YO NO VEO TELEVISION LOCAL! (Lo cierto es que, local o no, yo casi no veo TV, punto). Me dio verguenza ajena, me dio incomodidad con la muchacha gótica, porque yo tambi♪0n tuve mi época de gótico, por qué no, y terminé mi comida lo antes posible, para largarme del lugar. Al salir de MacDonald's el rubio alto todavía le celebraba las pendejadas producto del increíble ocio de este tipo.

A propósito de pocaverguenzas, tengo que decir que jamás había sentido tanta incomodidad, y de tal nivel, como cuando a las 2:37am, el vecino del frente comenzó a tener sexo candente con su jevita. El hombre dejó la luz encendida y la puerta de su balcón abierta, lo que dejaba ver el espectáculo que tomaba lugar en su sala. Yo, que estoy acostumbrado a todo tipo de pornografía posible desde los 14 años de edad, sentí pudor, y quedé irreparablemente marcado, aún cuando creía que ya estaba insensible a ese tipo de estímulos. Tuve que despertar a uno de los roommates, y nos subimos al techo de nuestro edificio, desde donde pudimos ligar mejor a los amantes en plena accón. Sucede que la tipa lo sentó en el sofá y comenzó a practicarle una rica mamada. Se veía su cabello negro largo azotando el espacio hacia arriba y abajo. Después de como quince minutos ejecutando esta acción como toda una maestra, el tipo la levantó en sus brazos, y la sentó en su falda. La diva comenzó a brincar encima de él. Lo extraño de esto es que él no la miraba. Sus ojos estaban clavados en mi roommate y yo, que estábamos en el techo viendo todo claramente. La escena continuó por doce o trece minutos más, cuando él la levantó para ponerla en cuatro, y clavarla por detrás. Debo admitir que me excité muchísimo cuando por fin pude verle el culo al tipo. Lo otro que me excitó fue que semejante barbaridad se me ofreciera en bandeja de plata. Esto sí que nunca me había sucedido. Luego, él volteó su cabeza para ver si todavía mi roommate y yo estábamos mirando. Nos habíamos bajado y estábamos escondidos en la sala, mirando por la ventana a través de nuestro balcón en el segundo piso de nuestro edificio, que es el del frente. El tipo dio cuatro azotes finales y culminóo en un orgasmo que ella saboreóo en su cara, cuando él la volteó violentamente. Miró nuevamente a ver si nos veía. Luego apagó la luz y cerró la puerta del balcón. Extraño a Río Piedras.

Wednesday, May 24, 2006

El olor entre las piernas, cap. 76 Aguacero

El olor entre las piernas, Cap. 76 Aguacero

A veces me da con creer que sigo escribiendo este libro para que alguien sepa que San Juan existió antes del Gran Cataclismo. Porque aunque peque de fatalista, hacia allá nos dirigimos. “Puerto Rico Grita” fue un fracaso total. A nadie le interesa que el gobernador quiera resolver la crisis con una medida a largo plazo. A nadie le importa que Fortuño y McClintock, que son del partido contrario, lo apoyen en esto. Quieren que el hacha, que ya fue, acabe de venir ya de vuelta. Y que nos jodamos de aquí a un año.

A nadie le importa tampoco el sueño de los demás, sólo a los que lo padecemos en carne propia, cuando al día siguiente no funcionamos sin el fastidioso café negro o los tres vasos biggie de Coca-Cola con las seis pastillas para rebajar, más una segunda dosis a la hora del almuerzo, porque si no, nos vamos 10-7. Y más los que tenemos que ir a trabajar un lentísimo turno de 8 horas con niños pequeños. Gracias y buenas noches. O mejor dicho: dulces sueños.

Y es que, aunque parezca raro, el propósito de esta columna es describir al país a través de mis vecinos del frente. Sucede que desde que vivo en la Calle Madrid, de la Urbanización SanTa Rita, he visto de todo. Desde el vecino del eficio del frente-derecha, que es dominicano y que vive en el segundo piso, y quien gusta de asomarse al balcón en calzoncillos blancos o de colores (pero siempre son low-rise con functional fly), hasta el otro vecino del edificio del frente-extrema-izquierda, del tercer piso, que es un gordito que se la pasa mirando hacia nuestro balcón, desde cuya puerta abierta se puede siempre entrever un televisor con película pornográfica heterosexual, con una mujer siempre con los labios pintorreteados de rojo y bien abiertos en abierto goce sexual; aparte de una magnífica biblioteca que se asoma por detrás de la TV. Sucede que en el edicifio que queda en medio de los últimos dos descritos, hay uno de dos pisos donde viven como cinco o seis machos, muy posiblemente prepas de la IUPI. Digo prepas, porque es en el primer año, en el que nadie coge las cosas en serio, en el que uno tiene todavía tiempo para pararse con las amistades al frente del hospedaje a beber, fumar y hablar mega duro, además de tener música de heavy metal a todo lo que da de fondo.

Ya le llamé la policía. Llamar la policía fue una odisea, dicho sea de paso. Primero llamé al 411 para que me dieran el teléfono del cuartel estatal de Río Piedras. Me dieron un tal 787-343-2020. Llamé y me salió una pendeja diciéndome que el número al que trataba de llamar no podía ser accesado de la forma en que marqué. Pensé: que mensaje tan pendejo. ¿Cómo se supone que debo marcar? ¿El 7 primero, esperar 5 segundos y luego marcar el 8, y así sucesivamente? ¿O marcarlos rapidito, uno detrás del otro? La música estaba tan alta que pasé por alto la alta tarifa de mi compañía de celular por concepto de llamas al 911. –Buenos días (ya era la 1:40am), Soto le habla. ¿Cuál es su emergencia? –Ninguna, -le contesto yo. –Esta es una línea de emergencias, ¿para qué llama entonces? –me pregunto un tanto maleducadamente y sin ningún tipo de tapujo existencial. –Mira, es que en el 411 me dieron el teléfono del cuartel de Río Piedras, pero no logro conectarme. ¿Tú me puedes dar algún otro teléfono de ese cuartel? El hombre me dijo que no había problema, que esperara un segunfo (literalmente fue eso, un segundo, el tipo fue muy eficiente, coño) y no sólo medio un teléfono, sino que me dio otro extra, por si las moscas. Me deseó buena suerte y buenas noches. Quedé sorprendido ante su educación. Supongo que era bipolar o bilateral.

Llamé a la policía y se personaron a la calle Madrid. Les digeron que bajaran la música, que se metieran para adentro, que a esa hora ya había gente durmiendo. Pero los machos del frente les contestaron sí, sí, y no hicieron nada, y ahora escribo mientras los observo y me ideo una maldición lo suficientemente compleja y fuerte como para hacerlos arrepentirse de sus pecados. Ha comenzado la época de mosquitos en Santa Rita. La empeora una ola de calor que está azotando la isla desde hace ya cinco días. Sería genial retar los mega odds e invocar la lluvia a ver si se cayan ya la boca y se acuestan a dormir. Pero con un Rama Secu Sura no creo que consiga nada. Ni siquiera con un Rama Secu Diluvia. No. Esto amerita algo mucho más potente. Continuaré escribiendo hasta que me lleguen las palabras adecuadas a la mente.

Sería genial un hechizo que hiciera que a todas sus novias les diera con sodomizarlos en estado de embriaguez. Méchanor Revéxiaga Malhechora. Pero eso no es suficiente. ¿Qué tal una en la que piensen que están tomando jugo de manzana, cuando en realidad se beben la orina de su compañero de cuarto? Orinaterga Messuna Mategana. ¿O una maldición que conste en que no paren de decir burrradas y hablar malo, aún delante de sus profesores, en momentos de clase, y delante de sus padres? Bocanogue Soltuta Berkana. Pero lo ideal es que caiga un tsunami del cielo, que lo ensope , les agüe las cervezas y apgue sus cigarrillos. Comienzan a llegarme las palabras de poder. Siento la piel que se me eriza. Una brisa que no existe me sacude el cabello. Los ojos se me viran hacia atrás de la cabeza. Mi propio roommate me pregunta si estoy bien, que qué me pasa. No puedo contestarle. Aún si quisiera, no podría porque me salidría en el Lenguaje Original de la Magia y podría herirlo. Esto es lo que llegó: Insercia Invigoratae Pluvia Maligna Diluviaga Arandarenega Irunviratae Demiurga Maligna Stratastasis Rameaga Copula Méchanor Reveexiaga Malhechora Orinaterga Messuna Mategana Bocanogue Soltuda Berkana Malintegra Mosquitaga Muertaga Picachuria Nefasta Finale Mondo Inferna Inatre Pluviaga. Esta noche habrá más que aguacero.

Tuesday, May 16, 2006

El olor entre las piernas, cap. 75 Puerto Rico grita

El olor entre las piernas, cap. 75 Puerto Rico grita

Esta columna no es para política. Por esa razón no había dicho absolutamente nada sobre lo que muchos de nosotros, los puertorriqueños despiertos, predijimos que sucedería en el país. Todavía estoy esperando la guerra civil, como epítome y resultado final del descontento general. Me encantaría que comenzara por el Capitolio, limpiando la casa, cortándole las cabezas en una guillotina pública a todos esos cabrones legisladores y senadores de mierda. Me fascinaría que la primera cabeza en rodar fuera la de Chiquitota, y que le siguiera la de Roselló, y la de Norma Burgos.

Dos cosas que sí me parecieron geniales, fueron la marcha de Puerto Rico Grita (convocada por Funky Joe y el Gángster, a quienes hay que felicitar por pasarse las amenazas del pendejo de Topy Mamery por el culo) y el anuncio en Televicentro. La historia no los perdonará… ni yo tampoco, porque todos los cambios REALES en la historia se han dado después de derramar sangre, y eso, sigo sosteniendo, es lo que le hace falta a este país. Y lo digo sin tapujos, aunque parte de esa sangre que se derrame sea mía o de alguien querido. He pensado incluso en alguna maldición sanguínea, lo suficientemente fuerte como para condenar al país entero a un siglo más de tortura, pero que sea una tortura de transición, porque aquí la gente le tiene terror a moverse. Sería algo así como pegarme un tiro en la mano, volármela pal carajo, y dibujar un pentagrama con ella en el piso, frente al Capitolio. Me llegan las palabras. Accurdia Rimembra Digrazia Inférnaga…

Cuando comencé este libro, que tenía en mente hacerlo en libro y no en forma de blog, tenía muchas cosas en la mente. Sólo había una clara: que quería describir a San Juan, y a Puerto Rico entero desde su gente, conociendo distinta gente y rescatando sus historias del olvido. En ningún momento estaba en planes convertir la columna en un espacio para el debate político, porque como manejador de ese tipo de foros, el papel se me queda muy grande por falta de conocimiento.

Algunas veces me puse poético y saqué columnas tituladas ESPIRALES, o como las llama un amigo lector, las “columnas de crisis”. Hubo momentos en que este libro tenía el indiscutible sabor a memorias, o novela autobiográfica. Pero creo que me inclino, porque me lo dicta la voluntad última, por la simple columna cuya única pretensión es la crónica descriptiva de la ciudad, no por sus edificios y lugares históricos o de interés, como San Juan: ciudad soñada, sino a través del elemento más humano, únicamente humano: su gente pobre, trabajadora, en cuyas espaldas descansa el mundo, y gracias a quienes, éste se mueve.

Me dio mucho gusto ver a Puerto Rico alzao. Entiendo que el pueblo se lo debía a sí mismo, aunque todavía se debe mucho más. Me encantó ver como las masas, la turba iracunda de todos nosotros, los plebeyos estuvimos allí en cuerpo o espíritu. Por si acaso, Manuel, yo no fui a la marcha porque tenía trabajo (mi marido se quedó sin empleo y yo tengo que correr con los gastos de ambos en lo que se resuelve su situación), pero mi pariente fue a pelear por sus derechos y sus habichuelas, que no siempre son lo mismo, y tuvo mi apoyo incondicional.

Eso sí, pude recoger varias historias de mi gente querida de este país. Hubo varias escuelas en el país a las cuales se les debe otorgar un premio, porque no hay mejor palabra para describir sus acciones que HEROICAS. Siguieron operando en el mejor interés de los niños, porque para esos maestros que fueron valientes y siguieron trabajando sin sueldo, y los padres que se unieron al plantel como conserjes y empleados del comedor voluntarios, los niños son primero. A los maestros que se tiraron a la calle, los felicito también, porque demostraron, de una manera muy distinta, que para ellos también los niños son primero, pues el país NO PUEDE CORRER SIN MAESTROS. ES IMPOSIBLE. Así de simple.

Quisiera aprovechar el espacio para disculparme con mis lectores. Estoy consciente de que esta columna ha perdido mucho de su sabor original. Esto se debe a que estoy pasando por una etapa en mi vida en la que casi no tengo saliva para gritar, ni cosas qué decir, mucho menos ganas de escribir. Estoy agotado, y cansado de escribir desde la oscuridad y el cansancio. Ahora quiero aprender a escribir desde la nota high, desde la alegría, desde el espacio de alguien que promete parar de sufrir y lo cumple, pero hacerlo bien, sin hacer el ridículo de Coehlo. A mis lectores: Maren Daganda Shambala Pacienza. Paciencia, por favor.

Thursday, May 11, 2006

El olor entre las piernas, cap. 74 Red Hot Chili Peppers

El olor entre las piernas,
Cap. 74, Red Hot Chilli Peppers

Escuchando la nueva propuesta de los Red Hot Chili Peppers, “Dani California”, hice más conexiones repentinas de las que hubiera querido hacer. Hace dos semanas me mudé de Torre del Norte. Me botaron porque me di de baja total de la maestría. Fue lo mejor que hice, pues luego de estudiar nonstop por 9 años y terminar dos bachilleratos, es momento de cogerse un break.

Getting born in the state of Mississippi
Pappa was a copper
And Mama wass a hippie…


Esa misma semana, luego de darme de baja, recibí una carta del Departamento de Vivienda de la Upr, diciéndome que como ya no era estudiante regular del sistema universitario, tenía que abandonar la habitación. Aún cuando había ya saldado mi deuda de $210.00 por semestre. Recogí mis cosas, mientras pensaba en lo que me esperaría al mudarme a casa de Kike, mi mejor amigo de Santa Rita. Sólo me venían unas palabras a la mente, que sonaron con igual eco que mis usuales Rama Luckiaga Fortuna Majora Sortílega Ramiaga. Y es que a lo mejor nunca había dicho que para la suerte, y sólo para la suerte, las palabras en el hechizo cambian luego de cierto tiempo. Rombirom Gouten Jáeke…

In Alabama she would swing a hammer
Price you gotta pay
When you break the panorama

She never knew that there was anything more than poor…

What in the world does your company take me for…


Llevo dos semanas en Santa Rita, en la calle Madrid, #984, apt. 4. Los vecinos del frente están bien ricos. Uno de ellos porta una especie de mohawk peludo, barba negra trimeada, y una pipa cervecera que luce de lo más bien. Se ve bien macho y podría hacer una disertación completa en este momento, sobre por qué me encantan los hombres tan machos. Y es que no hay nada más divertido que “hacerse cantos”, “molerse” en la cama, macho vs. macho, a lo macho, a lo bestia, teniendo sexo tipo DARS (duro, rápido, animal y salvaje).

Los vecinos de abajo son unos marihuaneros de mierda, lo cual me hace pensar en lo agradecido que estoy de que el aire frío baje, y el cálido suba. Se crean nubes verdes enteras que me dan bofetadas de arrebato mientras escribo en el balcón.

El edificio destartalado y descascarado del frete-a-la-derecha, ostenta una fachada multicolor technicolor, con balcones extraños y atemporales, y unos balaustres en el centro que no tiene ni son ni ton. El edificio no es insípido, pero sabe mal, y no hay forma de digerirlo. Quizás, lo único que vale la pena ver es el vecino dominicano del piso dos, apartamento de la izquierda, que sale en calzoncillos blancos a sentarse en su balcón a mirar alrededor. O tal vez, el turco del piso cuatro, apartamento también de la izquierda, que trae locos a mis roomates. Siempre sale a fumar puntual a las 6:47pm, con una bandana roja o negra. Me pregunto si sus bandanas representan algún código perdido entre homosexuales, aunque estoy seguro de que es tan heterosexual como clueless.

Black bandanna sweet Louisiana
Robbin’ a bank in the state of Indiana

She’s a runner a rebel and a stunner
On her merry way sayin’
Baby watcha gonna


No hay nada mejor para valorar nuestra evolución cultural humana que dormir en el piso de cemento con tan sólo un sleeping bag. Así duré una semana, hasta que se me trancó la espalda con un mega espasmo muscular. Uno podría preguntarse cómo dormían los seres humanos prehistóricos, si les daba espasmos a ellos también, y con cuánta frecuencia.

Por fin decidí comprarme un matre inflable, con una bomba de aire de mano. Error. Para un paciente de VIH, la fatiga a veces se hace insoportable tan siquiera con soplar para llenar un globo. La bomba me dejó asfixiado. Tuvo que venir Saúl, amigo nuestro de Cayey, para pompear la cama. Luego de una semana y media, se me trancó la espalda nuevamente, pues la cama se va vaciando poco a poco. Entonces, ¿de qué se trata dormir bien? He descubierto que tiene que ver con una cierta dureza, no muy dura, algo de fluffyness, y cierto hundimiento leve. ¿Sencillo no?

Looking down the barrel of a hot metal 45
Just another way to survive


En esa semana fue que el gobierno de Puerto Rico bochornosamente cerró operaciones. Mi pariente se quedó sin empleo y yo me vi teniendo pesadillas sobre Haití, sin querer preguntarme por qué. También soñé con inflar el matre con helio, a ver si se iba volando y me podía ir volando en él. Debo haberle escrito algo a la ciudad de San Juan, un poema titulado “Dust Devil”, el cual puede ser accesado en mi blog Words of Zen/Words Obscene.

California rest in peace
Simultaneous release
California show your teeth
she’s my priestess, I’m your priest

Para de sufrir, me decía yo mismo ante la situación imperante. Eso y muchos Rombirom Gouten Jáeke por aquello de ver si funcionaba el hechizo. Creo que se viró porque mi otro roomate resultó ser una gran pesadilla. Es uno de estos new-gay-ers, o recently-gayed, que vive obsesionado con ser “proper”. Tiene 19 años. Sucede que el cabrón pronuncia las “s” al final de las palabras, las “l” y las “r” donde van y como van, y le gusta decir que es de mente bien abierta para el sexo, pues para él: “eso es un lenguaje con el que tu te comunicas con ciertas personas”. Tremendo lenguaje me tiró una noche en que, luego de prestarle una de mis películas porno gay, a modo de broma le pregunto si se había masturbado ya, y me dijo que “eso no es tu problema, tú eres tan impropio, y eres un presentao!”. La loca maromera procedió a desvertirse de su momentáneo disfraz de loca histérica, que me recordó mucho el personaje principal de la nueva novela de Angel Lozada, No quiero morir sola y vacía, secuestrada por los editores de Isla Negra el mismo día de su lanzamiento en las librerías del país. La Orlanda, como le llamamos aquí, no de cariño, intentó retomar su argumento y decirme: “es más, tengo que decirte algo porque me lo tengo que sacar de adentro”, a lo que yo procedí a mandarlo a callar de mala forma diciéndole repetidas veces: “DON”T TALK TO ME, BITCH!”, casi comoun mantra. Desde entonces, si hubo amistad alguna vez, se jodió en ese momento.

She’s a lover, baby and a fighter
Shoulda seen it comin when
It got a little brighter


Anteayer me estaba bañando, y de repente, mientras me enjabonada, la presión del agua bajó de cantazo. “Me estoy bañado!”, grité. “Espérate!” me devolvió el cabrón. Espero unos cinco minutos y todavía no regresa el agua. Abro la puerta de mala manera y le grito: “Mira, me estoy bañando, puñeta! ¿Qué carajo estás haciendo con el agua?”. “Me estoy mojando el pelo. ¡Espera un momento!”. “Mojándote el pelo para qué puñeta? Y eso no puede esperar a que termine de bañarme, coño?”. “Está bien, sorry”. Sentí ganas de salir del baño, desnudo y enjabonado como estaba, y abofetearlo hasta hacerle sangrar los ojos. Me contuve por el respeto que le tengo a Kike, que es el ser con el sentido de humor negro más refinado y agudo que he conocido en mi vida. Eso se respeta.

With a name like Dani California
The day was gonna come
When I was gonna mourn ya

A little loaded she was stealing another breath
I love my baby to death…


Suponiendo que el mismo roomate, llegue siempre a las tantas de la madrugada, estás durmiendo en el sofá de la sala aunque pagas la misma renta que él, y que llega haciendo ruido y hablando duro, y escuchas todo lo que dice aunque tengas los earplugs que compraste expresamente para eso puestos. Añádasele a la ecuación, que por las tardes ponga siempre a Sarah Brightman a todo jender. Tienes a un escritor frustrado, insómnico, con ganas de matar a alguien. The Phantom of the Opera is here! Una vez. Dos veces. La canción sigue en repeat mode. The Phantom of the Opera is here! Seis veces. The Phantom of the Opera is here! Quince veces. “Mira, cambia el jodio numerito, mano!”. No me hace caso. “Qué tortura!”, le sigo gritando. Continúa hablando por teléfono sin importarle mis gritos. The Phantom of the Opera is here! Mano quita esa mielda ya, PUÑETA!”. Mi otro roomate, José, un pequeño gay recién botado de su casa por ser gay, estudiante de grado doce a punto de graduarse, siente mi furia, y temiendo una reacción violenta, que seguramente tendría lugar porque la loca con guille de la Brightman me estaba sacando el ghetto pa’ fuera, se para de la silla del balcón, va al cuarto de la Orlanda y le apaga el Playstation con el CD de la soprano. A lo que la loca engancha la llamada de mala manera y va hacia el balcón.

-Te voy a decir una cosa. La canción es mía. Es mi cuarto. Es mi Playstation. Yo la pondo cuantas veces me dé la gana y eso no es problema tuyo.
-Pues déjame decirte, -digo yo montado ya en tribuna-, que tú no vives fuckin solo. Vives en comuna, mano. Y me tienes jarto con la jodia cancioncita esa de mierda. ¿Tú quieres que yo te ponga la número uno de Red Hot Chili Peppers? ¿Quieres que te la deje pegá desde ahora, que son las 5:48pm, hasta las 9:00pm, la misma puta canción? ¡Me lo dices enseguidita, que yo lo hago pa’ rápido! Acuérdate que todo lo que tú haces lo puedo hacer yo también y más duro (canto ‘e cabrón hijo de la gran puta de mierda, pendejo mamabicho, loca histérica emplumada, te voy a jartar la cara a puños, te voa dejar esbaratao!… entiéndase que esto es lo que le quise decir que no le dije, por respeto sólo a Kike).

Mi roomate es un psycho. ¿Cómo enfrentas la paranoia de irte a trabajar con miedo a encontrar tus cosas afuera, tiradas en la calle? ¿Al dolor de espalda de que le dé con regalar en sofá donde duermes? El día que lo haga, adiós al respeto de Kike, y adiós a sus dientes y su cara. Hacía tiempo que no odiaba tanto a una persona desde Roselló, Rivera Schatz, Iris Miriam, Jennifer González a.k.a. Chiquitota, Julito Labatut y José Aponte. Para que no se vaya a entender que la tengo emprendida en contra de los PNP, que se sepa que admiro muchísimo a Kenneth McClintock, y a uno de mis mejores amigos gay, Eligio Hernández, que es PNP y me acogió en su hogar cuando más lo necesité en par de veranos y par de Navidades, en que la Resi cierra.

Odio a la Orlanda, no por ser tan pato y tan loca, porque allá cada cuál como quieran ser. Yo acepto a todos por igual, tanto como deseo que se me acepte como el macho varonil que soy, aun siendo gay, sin que se me acuse de estar dándome guille de macho, o sin que se me diga closetero. Si hay alguien que no es closetero soy yo, que nunca tuve un proceso de salir del clóset, porque nunca estuve dentro de uno. No, lo odio por desconsiderado y por hacerse el más proper, cuando es un vulgar esperpento de la sociedad, un deshecho de la naturaleza a quien le dedico con muchas ganas la canción “Rata de dos patas” de Paquita la del Bario. Hay cosas en las relaciones interpersonales que son lógicas, que ni siquiera se discuten. Uno simplemente es considerado con los demás cuando quiere que consideren a uno. Es lógico. Punto y se acabó. Pero bueno, tiene 19 años.

California, rest in peace
Simultaneous release
California, show your teeth
She’s my priestess, I’m your priest


El dolor de espalda se me ha quitado. Ahora me llamaron de CONCRA para decirme que hay un masajista disponible. Una de mis fantasías es que fuera el muchacho del frente, el que tiene el mohawk. Me lo imagino vestido, con camisa de manga corta y troussers blancos, bien peinadito su mohawk, sacándome el odio para afuera a fuerza de reiki, shiatsu y masaje sueco, haciéndome macho con sus manos de hombre varonil, y medio pipón cervecero que tanto adoro en los hombres de aquí.

Who knew the other side of you
Who knew what others died to prove
Too true to say goodbye to you
Too true to say say say


Chileo con la canción nueva de los Red Hot Chili Peppers, dejándola en mi computadora una y otra vez, haciéndola mía, y haciéndome uno con esta ciudad perdida, jodida por gente desconsiderada que no piensa en el que está al lado, dándome cuenta de que el país está jodido por culpa de nosotros en nuestros propios hogares, que no importa si en casa somos una cosa, y en la calle somos “proper”, esas energías jodidas se cuelan por debajo de la puerta de las casas y salen a cagarse en el país.

Push the fader, gifted animator
One for the now and eleven for the later

Never made it up to Minnesota
North Dakota man was a gunnin’
For the quota

Down in the Badlands
She was saving the best for last

It only hurts when I LAUGH
Gone too fast

California, rest in peace
Simultaneous release
California, show your teeth
She’s my priestess, i’m your priest

Wednesday, April 26, 2006

el olor entre las piernas, cap. 73 salchicha, salchicha o puro veneno

El Olor entre las Piernas
Cap. 73
Salchicha o puro veneno

Trato de entender este país y me asombra no lograrlo. Sorbetodo, me encanta no poder hacerlo. El país jodido y tocando fondo, y cuando prendo la radio, hay una pendeja diciendo: “salchicha, salchicha, salchicha, salchicha, salchicha, salchicha…”. Cambio la estación buscando algo, alguien que pronuncie las palabras que tanto espero, que la crisis económica se va a solucionar, que los maestros no se van a quedar sin empleo, que mi marido, que es maestro, no se va a quedar en la calle. No escucho nada que no sean rumores de paros de tronquistas, convocatorias a paros generales de Funky
Joe y el Gángster, y otro pendejo diciendo salchicha, salchicha, salchicha, sal y chicha porque esto es el apocalípsis (aunque sea el fin del mundo solamente en Puerto Rico, cuando sabemos que en Minnesota, cuando salió Ventura, hubo que cerrar el gobierno, la transportación pública, hospitales y escuelas por una semana entera, para poder bregar con la crisis económica en la que Ventura dejó al estado, sin tomar en cuenta que Minnesota es un estado 80 veces más rico que Puerto Rico).

No sé cómo seguir esta columna, sin dejar de criticar a ciertos entes malignos. Sucede que la primera página de El Nuevo Día de hoy, el director del periódico catalogó de único culpable de la situación del país al gobernador. Yo pienso que eso fue asquerosamente irresponsable, insensato y vulgar, especialmente viniendo del director de un periódico que se jacta tanto de ser vertical.

A los que tampoco se les ha escuchado, aparte de a mí, son a los religiosos de este país. Deben estar temblando tanto como sus arcas, porque ahora con la crisis, los feligreses no van a tener dinero para llenarle los ojos y los bolsillos. Cristo nos ama a todos, aunque deje que se joda el país.

Llevaba casi un mes callado. No sabía qué decir, hasta que me encojonó el comentario a mi columna de “V for Vendetta” de Manuel Clavell-Carrasquillo, a quien amo y respeto muchísimo. Decía él, o daba a inferir, que yo no tengo los cojones de hacer un José Martí act, que hablo y hablo y que sería bueno verme tirándome a la calle, al frente de mis proposiciones diabólicamente violentas. Porque para Manuel Armando la violencia aparenta ser diábolica. Pero, ¿cómo reaccionas, cuando tu marido se queda sin trabajo por culpa de senadores y legisladores poco profesionales que insisten en seguir gastando el dinero del pueblo audicionando si hubo o no un esperpento llamado C-59. Me da vergüenza, Manuel, que te olvides de que este, tu pana, toca fondo todos los días. Nada más te digo que soy VIH+, que tú ya más que lo sabes, y que durante dos años que no tuve beca Pell para pagar mis estudios, me vi forzado a no sólo trabajar y estudiar a la misma vez, sino también a “hacer” la Plaza de Río Piedras y la playita de frente al Capitolio para poder completar mis pagos de la Universidad. Me parece que tú jamás tocarás fondo como he tocado yo.

Y mientras tanto, gente como tú sigue llamando a las emisoras a decir “salchicha, salchicha, salchicha”, o tal vez son los que siguen ilusa e inocentemente defendiendo la paz, una paz ciega, una paz incierta, con tantos adjetivos negativos como supuestamente negativa es la violencia misma. Yo me reinvindico: que sea lo que Dios quiera, si algún día de estos me da con convocar una guerra civil en serio. Que sea lo que Dios quiera porque el encojonado soy yo, y como tal voy a ser el primero en estar allí, porque son mis putas habichuelas con las que está jugando el gobierno, las putas habichuelas de mi marido, que es mi familia. Manuel: YO no tengo que excusar ni esconder mi odio gutural hacia los políticos de este país. Y by the way, esto no es un escrito defiende-balas como los catalogas tú. Esto es un escrito balístico. Punto.

El gobierno esto, el gobierno lo otro… ¿hasta cuándo vamos a seguir evadiendo la responsabilidad de nuestros actos? Tenemos mucha culpa nosotros, por haber elegido mixto pensando que era lo más inteligente, cuando en este país la gente vota íntegro porque la política es partidista, familiar, tradicional y genéticamente hereditaria. No hay nada más vergonzoso que sentir el revés de la estupidez ante el raciocinio. Vuelvo y pregunto: cuando estás jodido por culpa de los que tienen poder sobre ti, y tratas de hablar con ellos, y al tratar de racionalizar con ellos te topas con una pared de gente que no le importa que te quedes sin trabajo… ¿qué haces? ¿Sigues creyendo en esa paz pendeja e insípida que no vale la pena? ¿Qué carajo haces? ¿Te ríes de las estupideces de dos idiotas que dicen “salchicha, salchicha, salchicha” muchas veces, como parte de un chiste que sólo entienden unos locutores mediocres y ciertos trabajadores de la palabra que escriben poesía por el solo placer de escribirla? Pero no lloren los que lean esto, ni se tambaleen porque dije que fui puta por necesidad, porque esto no les afecta a ustedes. Lo que ustedes no sepan no les hace daño. Después de todo, no hay nada mejor que enajenarse de lo que a uno no le compete. Dios sabe que a mí me encantaría, pero no puedo hacerlo, ni por mí, ni por la gente que sólo tiene voz en esta trapo de columna que no es, ni será jamás lo que pretendí que fuera en un principio, porque soy un pésimo escritor, porque ya no tengo ni tiempo para leer, y por no leer, ya hasta se me olvidó escribir. Cuando comencé este libro lo que quería era describir la ciudad de San Juan, pero no sólo los lugares bonitos, sino los puelkos (y lo escribo así, bien puelkamente, porque yo mismo soy un puelko y no tengo problemas con ello), los bajos, los pobres. Y entiendo que si quiero seguir firme en mis convicciones para este libro, no puedo darme el lujo de enajenarme al dolor de la gente que como yo, toca fondo todos los días tratando de hacer algo con sus vidas en el sentido no figurativo de la frase. Mi gente tiene una voz en esta columna, porque ahora más que nunca, el compromiso con ellos está claro. Ahora es que tengo que ir a Trastalleres, a Fanguito, Barrio Obrero y Salsipuedes, a la Perla, que es como salir del país y entrar a otro mundo (recuerdo cuando fui a buscar coca con los españoles amigos míos, la Alba y el Andrés, que fuimos en mi carro, y allí, frente a las casas había doñitas jugando dominó en mesas, mientras los maridos tendían la droga en paquetitos en mesitas aledañas para la vista de los posibles clientes; no me olvido de cómo Alba se puso a regatear con uno de los señores que vendía droga allí, mientras los nenes de La Perla jugaban tranquilamente con bolas de playa y unos perritos bebés sarnosos de raza datschhund, que ya ni se notaba que eran datschhund; que es como otra dimensión dentro de Puerto Rico). Mi gente tiene una voz conmigo y ese, ahora más que nunca es el compromiso de El Olor entre las Piernas, Manuel. Coño, que esto no es San Juan fucking Ciudad putamente Soñada, libro donde el autor omite completamente los lugares donde viven los dominicanos en esta ciudad.

A lo mejor la gente pendeja de este pueblo tiene razón, me refiero a los que llaman a las emisoras y dicen “salchicha, salchicha, salchicha”. Ante el descalabro de este país tan chulo, tan bello, y tan mierda como éste, esa es la solución: Sal y chicha. Sé puta. Que Cristo te ama.

Sunday, March 19, 2006

el olor entre las piernas, cap. 72 Remember, remember the 5th of November


El olor entre las piernas, cap. 72
Remember, remember the 5th of November

Sucede que Guy Fawkes era un tipo común y corriente que hizo un acto de extrema locura y valentía: intentó volar el Parlamento británico en 1605 con mucha, mucha pólvora. No es de extrañarse que los ingleses, furiosos ante semejante acto de sedición, y sin detenerse a pensar en los motivos del individuo, lo tiladaran inmediatamente de traidor a la nación, para luego torturarlo y ejecutarlo en la horca. Sin embargo, todos los 5 de noviembre se reúnen a celebrar lo que llaman Bonfire Night. Así, como si fuera el día de San Patricio en Irlanda, en Bonfire Night la familia inglesa se reúne en el patio de atrás de la casa, hacen un barbecue, o lo que sea que hacen los ingleses cuando se reúnen, beben "ale" y contemplan su vida a través de los fuegos artificiales. Qué es lo que celebran, en realidad, sin darse cuenta? El intengo de Guy Fawkes por darle un frenazo a lo que él concebía como desastroso: los inicios e indicios de que el mundo estaba destinado a convertirse en la porquería que tenemos ahora.

A veces me pongo a pensar en qué momento del camino Puerto Rico se jodió. Acaso fue desde que Aníbal Acevedo Vilá ganó las elecciones como gobernador, ganando también la plataforma PNP para joderle la existencia y hacerle el reinado imposible? Tiene que ver con la trifulca por el poder entre Pedro Roselló y Kenneth McClintock? Se debe acaso a la pesquisa del video C-59? O es que lo que tenemos ahora es el resultado de años y décadas atrás en el que el cado se estaba cocinando?

A lo mejor alucino, pero dando marcha atrás a la historia, este país empezó a joderse desde que don Luis Muñoz Marín mandó a derribar el tren existente, para invitar a las compañías americanas y europeas a que invirtieran en traer más automóviles a Puerto Rico, obligando a los criollos a comprar los mismos. Qué tenemos ahora? Tapones que le sacan el más exacerbado road rage a gente que usualmente es pacíficamente vaga e imposiblemente pasiva. Compañías de arquitectos e ingenieros mediocres e imbéciles que destruyen casas históricas en Miramar y Santa Rita para vender los espacios como parkings multipisos (y uno se pregunta si la imbecibilidad la adquirieron antes o después de coger los cursos de Historia del Arte Contemporáneo, donde de seguro les tuvieron que haber hablado del Art Nouveau, el Art Deco y la arquitectura de su país; o si es que por irse a un colegio técnico y adelantar su carrera, traducción : "terminar más rápido", se perdieron la oportunidad de coger estos cursos). Desarrolladores que no entienden lo que es la zona del karso y los manglares, o peor, que no les importa un coño que son éstos, no lo que representan a nivel ambiental. Y sobretodo, políticos que sólo tienen en la mente el signo del $$$, y la palabra PROGRESO, sin preguntarse "progreso, hacia qué?".

A lo mejor me voy en brote, pero podría dar marcha aún más hacia atrás, al momento en que Emeterio Betances le vendió el alma al diablo (Estados Unidos) con tal de deshacerse y librar a Puerto Rico de España. Con eso, le enseñó a los políticos modernos a que todo es relativo, a que no hay constantes, y que como nada es duradero, no vale la pena defender nada, todo es vendible, nada es imprescindible. Ni siquiera la dignidad. Y de paso, le enseñó a los boricuas a que la dignidad precisamente porque no te da de comer, no te hace falta. En otras palabras, LOS PUERTORRIQUEÑOS SOMOS PERROS FALDEROS gracias a Betances. Gracias por bajarnos la autoestima colectiva y tirarnos al fango, porque gracias a ti, Betances, nunca entenderemos que la dignidad SI hace falta, que aunque no nos da de comer, nos da un norte, nos da aspiraciones, nos da equilibrio; que SI necesitamos el arte, que aunque no nos da de comer, y no sirva para nada, sirve para darnos belleza, porque al mundo entero no le viene mal más belleza, esta siempre hace falta, y deberíamos acostumbrarnos a pagar por ella, como lo hacen otros países, pero también a buscarla y crearla como Dios manda; que SI es necesario pensar en los demás a la hora de tomar decisiones, que no vivimos en un vacío, ni social ni cultural, y que por alguna razón no podemos vivir completamente solos, porque nos volvemos locos.

Anoche vi la película V FOR VENDETTA, basada en un cómic de Alan Moore que realizó en la época en que la Thatcher era Primera Ministro de inglaterra. Durante los ochenta, la política de la primera ministro se cconvirtió en lo que hoy se conoce como "thatcherismo", que implica, entre algunas cosas: oposición a las uniones obreras y sindicales, reducciones en programas dirigidos al público, privatización de industrias y servicios del estado. Sus políticas causaron desempleo masivo y una gran desindustrialización, razón por la cual, es una de las figuras inglesas más odiadas por el pueblo.

Me pregunto, hasta qué punto Puerto Rico ha caído en el thatcherismo. V FOR VENDETTA propone un mundo que se acerca terriblemente a esta isla, dominado por un partido conservador que gira alrededor de un político corrupto y extremadamente demagogo, que se parece demasiado a Hitler, pero que bien podría ser Roselló (quien es el IMBECIL más grande que ha parido este país, al atreverse a compararse con Ghandi y Martin Luther King, Jr.; de más está decir que ambas figuras se le quedan tan grandes como decir hormiga ante Vía Láctea). El mundo dentro del filme también nos habla de la prohibiciones del arte como vía hacia el pensamiento libre, de la política de oposición, de los movimientos sindicales, de la homosexualidad, de otras religiones que no son la oficial, de la variedad tal y como es variedad (y piensa un poco, lector, si no es cierto que la Inglaterra de la película es un reflejo del Puerto Rico de hoy, domingo, 19 de marzo de 2006).

Al igual que en la película, a mí me gustaría ser V, y buscar la forma de enviar una AMA llena de fertilizante, jabón y pólvora al Capitolio, con todo y senadores mientras se reúnen contentitos a deliberar nuevamente sobre el fucking video C-59, que NO TIENE RELEVANCIA ALGUNA PARA EL PUEBLO. O mejor aún, coger 12 latas de spaghettis Chef Boyardee, hacer una molotov con ellos, tirarle par de bombas a la casa de Roselló, a la de Rivera Schatz, y a la de Félix Plaud, así como a la de Rubén Berríos, Fernando Martín; explotarle las Explorers y las Caravans a los desgraciados del PPD, por hacerse los que hacen algo y no hacen un carajo; pero más que nada, organizar un ejército de enmascarados que saquen a toda esta basofia de gente vaga, quienes se ganan un sueldazo por hacer nada, y que insisten en que es importante que el presidente del partido ocupe el escaño de Presidente del Senado, cuando nosotros los parceleros, los pueblerinos, los perros falderos sin niguna dignidad escogimos a un representante que SI nos pareció digno. Insisten es decirnos que es importante la pesquisa por el jodido video C-59, cuando NO LO ES. E insisten en demostrarnos que hacen algo en su tiempo, cuando NO HACEN NADA DE VALOR CON EL DINERO QUE LES PAGAMOS.

Yo haría un Guy-Fawkes-Act, por qué no. Claro que lo haría! Este país está jodido porque le hace falta una guerra civil y nadie se atreve a aceptarlo. Nadie se atreve a darle cara. Yo quiero un guerra civil para este país. La necesito y la necesitamos, porque es mucho el coraje, y la rabia ya opaca nuestra razón. Lo predigo, alguien está a punto de cometer una gran estupidez, y este país se va a ir al coño.

Thursday, March 09, 2006

El olor entre las piernas, cap.71 La cancha de la Comunidad Figueroa

El olor entre las piernas
Cap. 71
La cancha de la Comunidad Figueroa

Hoy parecía un buen día para montarse en el carro, buscar alguna forma de evadir el tapón de las 5:30pm, y tirarse por ahí a buscar algo más que urbanizaciones a las que la AEE les corta los árboles hasta dejarlos en tucos con tal de no tener que venir a podarlos dentro de 6 meses. Esta columna bien podría prestarse para criticar masivamente esa acción, y de paso, darle una bofetada a los ingenieros que habitan en el cénit de esta ciudad. Asimismo podría prestarse para destruir a mi gente por lo vaga que es, pues qué rayos es eso, de no querer volver dentro de 6 meses a realizar una labor que les toca? Adónde se ha ido el placer por un trabajo bien hecho, la satisfacción de realizar la labor que a uno le toca, como parte de un todo social? Pues eso, en este país se perdió hace más de diez años atrás, y estoy siendo compasivo. Pienso que debemos asumirlo como grupo, que somos vagos, aunque no lo seamos, para así tener por lo menos, un punto de partida. Es como el conserge del piso 5 de Torre del Norte, mi piso. El tipo no hace nada, viene a chulear con las chicas del piso 4 y no limpia ni hace nada. Están locos por despedirlo, pero no pueden hacerlo porque está unionado. Que no puede usar químicos fuertes porque le da asma. Pues que renuncie y abra la plaza para otro que sí quiera trabajar, coño! Esta semana, otros tres muchachos de mi piso y yo le sacamos fotos a los baños de nuestro piso. Una costra marrón-púrpura creció en los azulejos del piso de las duchas, mientras que se podía leer claramente CONSERJES PUERCOS! en las losetas de las paredes de las duchas, pues alguien escarvó las letras de entre la costra blanca que deja el jabón después de más de un semestre sin echarle lejía, o raspar las losetas con una esponja de BRILLO. Hicimos unos fliers en forma de protesta que pegamos por todos los pisos, por el sótano (que funje como oficina del equipo de mantenimiento) y la oficina de la directora de la Residencia, todo esto a las 4:30am. Los fliers leían consignas como: "Así de puerco debes ser en tu casa...", "Si no quieres trabajar, dale tu plaza a otro", y "Si no limpias hoy este chiquero, mañana te pediremos la renuncia e iremos al periódico Diálogo con estas fotos".

Pero esta columna no es para eso. Este escrito es mucho más compasivo que una simple diatriba contra un país negligente que atraviesa por un período de negación.

Como dije, hoy era un buen día para perderse por algún resquicio de San Juan. Paseaba por la calle Cerra y decidí meterme por lo que resultó ser la Barriada Figueroa. Me pareció interesante ver las casas apiñadas unas casi encima de las otras, dejando poco espacio en sus calles, claro con automóviles estacionados a ambos lados de ésta. Los niõs y jóvenes llegaban caminando de las escuelas, con distintos uniformes: unos de camisa amarillas, otros de camisa color vino, faldas azules, y verdes. Entre las calles Villamil y Las Palmas, se erige una gran caldera circular, que me pareció la cisterna de la urbanización. Pero me impresionaron dos cosas, más allá de la cisterna. Un poco más arriba, en la distancia, dos perros machos hacían el amor entre la basura, sin que nadie los interrumpiera, sin que a nadie le diera asco, un acto muy natural entre ellos. A la vuelta de la esquina, corriendo un poco más en el Buga, mi auto, me topé con la cancha. Tenía un letrero que leía: CENTRO RECREACIONAL COMUNIDAD FIGUEROA. La cancha estaba circundada por una verja perfectamente labrada, refungiando en su vientre a unos muchachos descamisados que ostentaban cuerpos perfectos a fuerza de trabajo duro, hambre y baloncesto, de esos cuerpos fibrosos que el sudor sólo puede acentuar más. Jugaban tranquilamente, sin preocupaciones, enseñando la mitad de sus calzoncillos, mientras algunos adultos hablaban en la calle amenamente, guardándoles el juego, asegurándose de que no se perdiera la cancha entre adictos y tiradores de drogas migratorios. Me pareció tan familiar que enseguida me entristeció saber que a esta comunidad le queda poco tiempo, antes de que el aire general de Puerto Rico la contamine con su violencia, y se interponga la vagancia y nadie quiera luego hacer nada.

Thursday, February 23, 2006

El olor entre las piernas, cap. 70 Trastalleres

El olor entre las piernas, cap. 70
Trastalleres

Son dos torres que se erigen cerca del CDT Hoare, en dirección al parque central. Son exactamente iguales, salvo por el hecho de que una está completamente abandonada, sirviendo de hospitalillo/refugio para deambulantes, próxima para demolerse; mientras la otra alberga todo tipo de quehaceres: desde oficinillas de profesionales humildes, hasta un laundromat y un gimnasio lleno de hombres pompeados, sudados y apetecibles, con la piel roja e hinchada por el ejercicio duro y honrado.
Me da vergüenza admitir que fue hoy que de veras me di cuenta de que ambos edificios rosados existían. Lo cierto es que sí lo sabía, pero no conocía su nombre. Aparte, "Trastalleres" me sonaba a Barrio Obrero, que se me figura como una parte de San Juan a la que siempre trato de llegar, pero se me oculta, porque siempre se me pierde la salida correcta, como el jardín secreto de Mogador, o como la biblioteca Akáshica del Plano Astral.

Me detuve a observarlas por un buen rato, tratando de entender el ímpetu con el que el segundo edificio se esforzaba con tal de no caer en la sombra del primero. Los apartamentos reflejaban una decoración casi barroca, como si sus dueños estuvieran tratando demasiado de mostrar signos de actividad en el edificio, como si estos signos pudieran de alguna forma retrasar la eventual entropía, y muy posible demolición, si nos acordamos de que estamos en San Juan y de que últimamente los edificios no gozan de abogados, ni mecenas, basta con pasear por la calle Peregrina de Santa Rita.

Caminé un poco por sus aceras, tratando de aspirar hacía adentro ese pedacito de ciudad, taking it all in as much as possible. Pero fue cuando vi a los dos muchachitos en bicicleta que se me conmovió la caja toráxica. Eran puramente negros, lo que llamamos en Puerto Rico violetas, y se acercaron sonrientes a un hombre blanco (tan blanco como se puede ser en esta isla siendo puertorriqueño), y se le echaron encima para abrazarlo.

-Míster! Míster Rodríguez! Se acuerda de nosotros?

El hombre, muy guapo y que no debía pasar de los 43 años, se acordó de ellos, y los abrazó fuertemente. Los tres comenzaron a llorar y a hablar muy amistosamente, mientras el maestro llamaba a su esposa, que se preparaba para cruzar la calle.

-María, corre ven aca! Mira quiénes están aquí!

La señora se acercó, y cuando los reconoció, a ella también se le aguaron los ojos, por lo que deduje que también había sido maestra de los jóvenes. Los abrazó muy cándidamente, y cuando se despidieron, les dijo que los quería mucho y "que no se perdieran", lo cual puede significar, 1: que mantuvieran contacto, o 2: que no se perdieran en el mundo de las drogas, la pobreza, o tal vez el mismo Trastalleres, aunque me da la espina de que tratándose de esta comunidad, es más el mal de la pobreza lo que impera, que cualquier lío de drogas. Me da la espina el segundo edificio, que sigue tratando de vivir lo que el primero no pudo, de llegar a una eternidad que ninguna falta de planificación urbana de los gobiernos venideros de este país pueda demoler como casas históricas de art deco en Santa Rita.