Monday, February 06, 2006

El olor entre las piernas, cap. 67 Palaberinto Malfunctions

El olor entre las piernas,
cap. 67 Palaberinto Malfunctions
(celebrando los dos años de edad que tiene este blog
y el hecho de que se les olvidó a los del Nuevo Día
que esto también es un blog literario.
Muchas gracias por no mencionarme)

Tengo una molestia que espina los pulmones. Pero no es interna. Los otros días discutía con mis estudiantes los elementos de un cuento. Nos detuvimos un buen rato en el conflicto. El hombre vs. su entorno. Creo que esa es la molestia que llevo por dentro, que el país se me cae encima, y no toco fondo.

Ayer sábado encontré, en la página 35 del periódico El Nuevo Día, un error inperdonable en el palaberinto. Una de las palabras a buscar “Solar” estaba circulada ya, pero en el elipse que la encerraba, se leía “Olarar”. Siempre he pensado que los crucigramas y los palaberintos deben ser perfectos, que son el reflejo de las bases de un lenguaje que aún tan cambiante como es el español puertorriqueño, deben ser perfectos para que la fachada de un país culto y progresista se mantenga. Sólo cuando me di cuenta del error, y luego de buscar el término “Olarar” en el diccionario y no encontrar su significado, fue que entendí cuán jodido está este país.

La semana pasada asesinaron a un viejo amigo mío. Se llamaba el Jadmmal Luis Torres y era supervisor general en el Hospital Metropolitano. Conocí a Jadmmal por el nombre de Luis, porque a él no le gustaba su nombre que parecía árabe, mucho menos luego de los ataques del 9/11. Lo leí en el periódico, que lo encontraron desnudo en su bañera, en la que una vez yo me bañé, acuchillado siete veces, derramando sangre por el piso de su cuarto, cerca de la cama en la que alguna vez Luis y yo tuvimos sexo, porque Luis fue la primera persona que me hizo fistfucking, y sé que es un poco delicada la situación, pero hay que hablar de esto.

Luis no eyaculaba como el resto de nosotros, porque por alguna razón, según él mismo me dijo una vez, porque se había hecho una vasectomía, por razones que nunca me contó. Lo más que me impresionó fue su colección de arte, que enriqueció, o quiero pensar que así lo hizo, con dos de mi pinturas, que me compró hace tres o cuatro años atrás. Me dijo que las pondría en su oficina. Perdí contacto con él y nunca pude ver su oficina, ni mis pinturas en ella. Nunca más lo volví a ver, hasta anteayer en el periódico.

Gran parte de mi molestia con este país de mierda es el periodismo. Hace mucho tiempo quería escribir algo sobre ello, pero nada me inspiraba hacerlo. Me molesta que sea el asesinato de alguien cercano, y la cubierta de las noticias de ello, lo que me mueva a reaccionar. Me molestó que en las noticias del canal dos, cuatro y once, no tocaran el tema con delicadeza. Prácticamente le dejaron ver a todo Puerto Rico que Luis era maricón y que su asesino era un bugarrón amante suyo que acostumbraba ir a su casa. No tuvieron la diplomacia y el tacto que se hubiera tenido hacia ese tipo de sucesos once o doce años atrás. Y yo me imagino por qué. Y es que con la prensa amarillista y sensacional del mundo haciéndole la competencia al periodismo de verdad con revistitas como VEA, ¡HOLA! o programas como la basura de LA COMAY o EL GORDO Y LA FLACA, me imagino que el periodismo serio tuvo que ajustarse los pantalones y hacerle la competencia. Y entonces es cuando nos encontramos con un José Esteves haciendo chistes por la mañana en un programa que se supone que sea informativo, no comedia; o a un Jorge Rivera Nieves haciendo comentarios pueblerino fuera de lugar en vez de continuar siendo el respetable hombre ancla que siempre ha sido. O a lo mejor esto sólo me molesta porque me tocó cerca, porque me parece una “linda” manera de volver a ver a un viejo amigo con el que uno perdió contacto hace tan sólo tres o cuatro años. Aunque si así men sentí yo, no quiero imaginar cómo se sintieron sus familiares, sus exnovios, si alguna vez se permitió tener parejas, y sobretodo, sus amistades meas allegadas, de las cuales, yo no formaba parte.

El día de hoy leí que piensan quitar lass salas de emergencia de todos los hospitales del país, y me di cuenta de que el ese error mínimo en el palaberinto es un reflejo de todas cosas mínimas que están rotas y jodidas en este país, porque creo que de eso se trata, de cosas mínimas, millones de ellas como estrellas en el domo del cielo nocturno, muchas pequeñas cositas fallando y trabajando mal. Por eso es que es imposible arreglar este país. Lo macro está jodido porque lo micro está mal completamente, y no hay forma de arreglarlo.

3 comments:

MaReS said...

Estoy de acuerdo. Este pais cada dia esta peor y la prensa ni hablar. Donde temas delicados, como asesinatos o accidentes se relatan como un cuento sin ningun tipo de tacto. Es lamentable ver como cada dia se vuelven mas insensibles al dolor de los demas. Buen post.

Lola Viajera said...

GRACIAS !

Bienvenida al "club", nadie sabe nada, nadie grita, nadie mama, hasta que le toca a uno de los nuestros estar posteado en las fucking páginas de los periódicos.

Sé como se siente y sé de lo que hablo, y mis muertes fueron dos. Trabajo en Outback SteakHouse del Embassy Suites. Con eso lo digo todo, no ??

Lo siento mucho !

elijah snow said...

a todos: gracias por su apoyo. Mares: gracias porque siempre estas ahi leyendome. Lola viajera: cuando lei ocurrido en Outback, me dije mil veces que no queria vivir en un puerto rico asi, sin embargo heme aqui, quejandome literariamente de todo lo que me apesta de esta gran ciudad, me alegra poder compartir esto contigo, gracias por estar ahi. Awilda: siempre es un placer leer tus comentarios, son como una lamparita que me ilumina el camino, una lamparita materna que tanta falta me hace desde que estoy en PR. SIRREAL: I really appreciate thy coments, they remind me a lot of the hood I grew up in, this be the second time i read your thoughts and you make me feel home, back in Hartford CT, you have me thanks for that, that you do. Anonimo Rodriguez: me encanta el silencio, sobretodo cuando es un silencio inteligente, a veces hay tiempo para callar, y a veces se le da mas apoyo a un ser humano callando que diciendo miles de cosas.